EE. UU. deja a la OEA en manos de la izquierda

La izquierda anti EE. UU. controlará la OEA, mientras Trump observa y lo recibe de brazos abiertos.

En perspectiva. Albert Randim, el canciller de Surinam será elegido hoy como el nuevo secretario general de la OEA. El surinamés cuenta desde septiembre de 2024 con el apoyo de la Comunidad del Caribe (CARICOM) que, en sí, le brinda 14 de los 18 necesarios para ganar.  

• Recientemente, recibió el apoyo de Brasil, alineando consigo a los países de la izquierda sudamericana.

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• Con los votos del CARICOM, Brasil, Uruguay, Colombia, Bolivia y Chile en la bolsa, su elección es una certeza.

• El apoyo de Lula llevó al único otro candidato —Rubén Ramírez, canciller de Paraguay— a abandonar su candidatura.  

Sí, pero. Lula había prometido al presidente Peña el apoyo de Brasil para Ramírez. Además del Paraguay, contaba con el apoyo de Brasil y EE. UU., dos países que, en conjunto, conforman un bloque de alianzas que le garantizaba la victoria.  

• Lula se reunió a principios de marzo con Yamandú Orsi, Petro, Boric y Luis Arce en Montevideo, para la previa de la asunción al poder del uruguayo.

• En dicha entrevista, los izquierdistas se pusieron de acuerdo para dar su apoyo al surinamés, traicionando la promesa de Lula.

• En un comunicado, Peña informó que de “forma abrupta e inexplicable, el Paraguay fue informado por países amigos […] que modificaron su compromiso inicial con nuestro país y decidieron no acompañar finalmente la propuesta del Paraguay”. 

Por qué importa. Rubén Ramírez era un candidato alineado con los principios fundacionales de la OEA. El paraguayo había sido un fuerte crítico de las dictaduras de Cuba, Venezuela y Nicaragua, así como de la creciente influencia de China en la región.  

• Por el contrario, su contraparte no ha acompañado las voces que exigen una democratización en dichas dictaduras.

• China espera influir más en América Latina a través de su delfín surinamés. El canciller ha sido vital para ampliar la presencia china en Surinam desde su cargo.

• El canciller ha afirmado apoyar el proyecto de la Franja y la Ruta, además de declarar que “hay una sola China y apoyaremos lo que hemos visto en otros países vecinos”. 

Entre líneas. Lula y sus aliados abandonaron a Ramírez en una ofensiva contra EE. UU. Así lo dejó entrever Peña que, en su comunicado, agregó: “El Paraguay ha sido un país que siempre ha basado sus posiciones en dichos elevados principios y valores, y no renunciará a los mismos por una elección o coyuntura particular”. 

• Dicha “coyuntura” es la agresiva política de Trump con países de la región, cuyos efectos han vivido ya México y Colombia.

• A Trump, empero, no parece importarle. El enviado especial para América Latina, Mauricio Claver-Carone, comentó: “EE. UU. considera a Paraguay y Surinam como dos aliados de EE. UU. No hay diferencias al respecto”.

• El aporte de Washington a la OEA y su peso diplomático hacen imposible ganar la secretaría general sin su apoyo. Con su visto bueno para el surinamés, desahuciaron a Ramírez.  

Ahora qué. Para Trump, el ciclo histórico de la OEA se ha cumplido. Para esta administración, los organismos multilaterales son inútiles; la bilateralidad es el camino. A la organización le espera un posible recorte de fondos por parte de EE. UU. e, incluso, su posible abandono.  

• Trump ha abandonado a Latinoamérica a su suerte, algo que los aliados de China han aprovechado para abrirle más la puerta.

• Con el desinterés de Trump, un candidato abiertamente apoyado por el Partido Comunista Chino dirigirá la OEA hasta el 25 de mayo de 2030.

• Mientras los socios de China ganan fuerza, los aliados de EE. UU. —como Paraguay— observan cómo Trump les deja indefensos ante traiciones como la de Lula y sus cómplices.