Infraestructura y movilidad, mancuerna crucial

Análisis y mejoramiento de movilidad juegan un papel crucial en la búsqueda de ciudades inclusivas, sostenibles e inteligentes. Ofrecen una solución para abordar desafíos como tráfico, contaminación y calidad de vida.

En perspectiva. Más de la mitad total de kilómetros que componen la red vial de Guatemala carece de cinta asfáltica. Invertir es una intervención de fomento económico y social. Llevaría a una mejor movilidad de bienes, servicios y personas.

• En la última década, Guatemala ha asignado a la infraestructura vial 0.7 % del PIB, según el BM. Registró un mínimo histórico (0.4) en 2017.  No obstante, se requiere 1.0 % para cerrar brechas que año tras año han incrementado.

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• Las intervenciones menores de tránsito incrementan la seguridad vial. Se combina la señalización adecuada, educación y modificaciones en infraestructura.

• El ingeniero chileno Andrés Villaseca participó en el foro “Modelos de tránsito y cómo mejorar la infraestructura de ciudadanos para la movilidad sostenible”, organizado por FUNDESA. Enfatizó la importancia de que el tema sea planificado como un sistema con visión a largo plazo.

Lo indispensable. Para resolver los problemas de movilidad se necesitan “puertas de salida”. El experto destacó que el primer paso es un método institucional compuesto por un organismo planificador y otro ejecutor.

• El primero debería recibir ideas de propuestas de otras instituciones. Su papel es revisar, priorizar y atender. Mientras que el segundo se encarga de materializar los seleccionados.

• Según Villaseca, al entender la movilidad como sistema, se resuelven los puntos más débiles en el siguiente orden: intersecciones, obstrucciones en la vía, ejes viales y autopistas.

• “Las evaluaciones deben ser siempre contra una situación teórica optimizada. Ejemplo, no se puede construir una autopista porque tengan déficit de capacidad, sin antes haber solucionado las intersecciones”, razonó.

Cómo funciona. La gestión de un modelo de tránsito es una oportunidad de corto plazo. El perito indicó que pequeños obstáculos producen grandes trastornos. Con todo, existen tres aspectos que brindan soluciones.

• Uno, los rediseños de tránsito menores (realizables en meses, no años). Abarcan pistas de giro a la izquierda, cambios de sentido de circulación, pavimentaciones puntuales, señalización, etc. “Logramos reducir la congestión vial”, explicó.

• Punto dos, la programación de semáforos a través de técnicas de configuración: diarios, planes fijos, actuados o en tiempo real. Actualmente, la MUNIGUATE implementa esta tecnología. Cada tres meses instalará 70 nuevos dispositivos.

• Finalmente, para que exista sostenibilidad de modelo se deben desarrollar capacidad y habilidades técnicas en diseño vial. La continuidad debe ser permanente y ha de transferirse en programas académicos.

Ecos regionales. Si bien la problemática del tránsito es un aspecto común en la región, Chile es un referente. Según el informe más reciente de competitividad del FEM, tiene las mejores carreteras de Latinoamérica.

• Cuenta con una red de carreteras (urbanas y rutas nacionales) óptima. En parte se benefician por estar en “buenas condiciones” y bien señalizadas.

• En general, los conductores cumplen con las normas de tráfico, contribuyendo a una experiencia más segura y predecible. Aunque existe congestión es menos severa en comparación con otras zonas.

• Una serie de criterios lo sustentan: integración de diversos modos de transporte, eficacia en la planificación de su red, puntualidad y accesibilidad de la información para los usuarios.

Balance. Las ciudades deben tener una sostenibilidad estética. La Ciudad de Guatemala tiene una topografía compleja. No hay que pensar en soluciones de largo plazo. Se requieren ideas sistemáticas y estratégicas de áreas específicas, como el Anillo C-50, Puente Belice 2, CENMA-Petapa y la CA-09 Sur. Al ser versátiles es normal que los planes de movilidad se modifiquen luego de un lustro.