“Miguelito” prepara asalto al BANTRAB

Esta semana es trascendental para el futuro del Banco de los Trabajadores (BANTRAB), pues está programada su asamblea general extraordinaria para el jueves –viernes, si no se alcanza cuórum el día anterior– en donde se elegirá a cuatro (dos titulares y dos suplentes) miembros de la Junta Directiva (JD).  

Por qué importa. La Ley Orgánica del banco estipula que el Presidente de la República nombra al presidente de la JD que, a su vez, preside la asamblea general; existe incertidumbre debido a que Jorge Mondal ha sido destituido como presidente y la Corte de Constitucionalidad (CC) no ha resuelto su situación jurídica; Luis Suárez, el suplente del presidente se encuentra en una situación similar. 

• Mondal fue nombrado por el expresidente Alejandro Giammattei a instancias de su pareja, Miguel Martínez, a modo de cooptar la institución bancaria. La intención, presuntamente, sería la de utilizar al banco para blanqueo de capitales producto de actividades ilícitas durante el gobierno anterior. 
• La referida Ley Orgánica estipula que para ocupar el cargo de presidente de la JD se deben cumplir requisitos mínimos: ser Auditor Público, Perito Contador o cuando menos, haber laborado diez años en el sistema bancario nacional. 
• La Superintendencia de Bancos (SIB), en respuesta a un requerimiento de la Secretaría General de la Presidencia, respondió que en sus registros no constaba que Mondal tuviese la experiencia de 10 años de trabajo en el sistema bancario. Mondal es Ingeniero y no Auditor Público o Perito Contador. Es evidente que no cumple los requisitos de ley. 

Fisgón histórico. Esta no es la primera vez –ni por asomo– en que se remueve a un presidente de JD del BANTRAB. De hecho, ha sucedido muchas veces y, sobre todo, al darse un cambio de gobierno. Sea por cambio de visión de una nueva administración o como “botín político”, ha sido una práctica usual; sin embargo, esta es la primera vez que el removido impugna tal decisión. 

• Existe un antecedente –respecto a la falta de calidades del presidente de JD– que es imprescindible tomar en cuenta para resolver la presente discusión. 
• En 2008, el expresidente Álvaro Colom nombró a Sergio Hernández como presidente de BANTRAB y según el expediente 1937-2008 de la SIB, fue impugnado [el nombramiento] por no acreditar las calidades necesarias para el puesto. En esa oportunidad se debió a la falta de honorabilidad. Nueve años después, la SIB resolvió que, en efecto, Hernández no cumplía los requisitos de la Ley Orgánica del BANTRAB, por lo que se instruyó al banco a que, en lo sucesivo, se cerciorase que los nombrados cumplieran con los requisitos de ley.  
• Ese antecedente –y la instrucción vertida– deben ser observados; la SIB debe emitir una resolución en ese mismo sentido. Aunque el caso ya está “judicializado”, no está precluida la facultad administrativa de la SIB cuya materia es privativa.  

Lo que sigue. En la asamblea convocada para esta semana se inscribieron dos planillas: la “1”, de los actuales, Estuardo Gamalero y Herbert Hernández –y suplentes–, que representan la línea institucional, y la panilla “2” de Sergio Castañeda y Hugo Cruz –y suplentes–, que representan los intereses de Miguel Martínez.  

• El esfuerzo por cooptar la institución bancaria requiere de dos cosas: que sea mantenido en el cargo Jorge Mondal –ya sea por protección de parte de la CC o por inactividad de la SIB– y que la asamblea de accionistas elija a los dos titulares y dos suplentes de la planilla “2”. 
• De ocurrir lo anterior, Martínez podría contar con 3 de 5 votos en la JD, obteniendo mayoría. 

En conclusión. Las acciones de amparo planteadas por Jorge Mondal en contra de su remoción deben ser resueltas por la CC tomando en cuenta, tanto el antecedente del caso de Sergio Hernández, como lo expuesto por la SIB: la falta de calidades de Mondal. Ello constituye ratio decidendi (razón para decidir) para no otorgar la protección provisional. 

• La SIB, por su parte, tiene habilitada la vía administrativa para resolver lo que corresponde: la carencia de calidades de Mondal para ocupar el cargo y, de esa manera, inhabilitarlo para ocuparlo. 
• Más allá de las decisiones judiciales y administrativas, los accionistas del BANTRAB, en la asamblea general, no deben dejarse sorprender por los esfuerzos de cooptar la JD.  
• Es imprescindible que se evite que un banco del sistema pueda llegar a ser cooptado y sea utilizado para blanquear capitales provenientes de espurios negocios gubernamentales durante la administración pasada.