EL TIPO DE CAMBIO DE HOY ES DE: Víctor Rodríguez Padilla, académico experto en temas energéticos, será el director general de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex). La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, lo anunció el pasado día 26.
El funcionario –de perfil técnico– viene de la academia para dirigir la estatal. Físico y maestro en Ingeniería Energética por la UNAM, tiene un doctorado en Economía de la Energía por la Universidad de Grenoble (Francia). Fue profesor invitado en la Universidad de California en San Diego, en el Instituto de las Américas en California, y universidades en Bolivia y Colombia.
Ha sido asesor en el Congreso, así como en varias instituciones mexicanas y regionales. Su trayectoria de 42 años en el sector le otorgan experiencia en organización y regulación, contratos, régimen fiscal, seguridad y transición energéticas, petróleo, gas natural y electricidad.
Para el subdirector de Análisis Económico y Bursátil de CIBanco (institución de banca múltiple), James Salazar, el nombramiento “gustó a medias” en el mercado. La razón: aunque el perfil es más académico y técnico, no cuenta necesariamente “con la experiencia como para manejar un tema tan complejo, como el de las dificultades financieras” de la petrolera.
Durante su presentación, Rodríguez Padilla hizo referencia a la enorme deuda de Pemex de hasta USD 130 000M, que se redujo a 94 000M, según sus palabras. Minimizó los señalamientos sobre la situación financiera de Pemex. Tras calificarlos de “exagerados” aseguró que la empresa no enfrenta las dificultades que se le atribuyen.
Pemex está financiada por el presupuesto que le asigna el Gobierno y no por utilidades. A decir de varios especialistas, debido a esta razón se encuentra en “un punto incierto y preocupante”. Cerró el primer trimestre de 2024 con una deuda financiera bruta de más de USD 100 000M, de acuerdo con un reporte del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO). Y en el segundo, registró su peor pérdida desde el covid. Lleva cargando este pasivo desde hace varios años pese a la inversión directa del Gobierno.
Rodríguez Padilla ‘hereda’ una empresa con finanzas críticas. Es imperioso revivir la producción que se ha desplomado a la mitad de su nivel máximo de hace 20 años. Sin embargo, en una crítica a lo que llamó los “gobiernos neoliberales” afirmó que “nos entregaron una empresa devastada, en ruinas, con refinerías cayéndose a pedazos que afortunadamente se han restituido y estamos en proceso de aumentar su capacidad”. Para ver que eso no es exacto baste el ejemplo de la refinería Dos Bocas (ahora complejo Olmeca). Inaugurada en 2022 tras varios retrasos, comenzó a operar en julio. En su primer mes procesó 65 046 barriles de petróleo crudo por día, de acuerdo con el informe mensual de Pemex. Una cifra muy distante de la capacidad de procesamiento de 340 000 barriles diarios anunciada por el Ejecutivo para ese complejo.
De igual modo, queda latente la inquietud de otros comentarios “populistas” emitidos por el próximo funcionario. Estos están en la línea de la administración de AMLO, como han sido los mensajes de la soberanía y defensa energéticas del país.
De hecho, los bonos de PEMEX denominados en dólares y con vencimientos en 2047, mostraron una contracción de 1.29 % en los primeros días desde que se diera a conocer su nombramiento.
El futuro director dijo que mantendrán la producción en 1.8M de barriles por día, una de las instrucciones de Sheinbaum. Prometió, asimismo, que la estatal dará un giro hacia la sostenibilidad. Su objetivo es transformar Pemex en una empresa verde.
Aseguró que Pemex continuará con la producción de petróleo y gas, pero también apostará por las energías renovables. “…Vamos a hacer energía eólica, energía solar, eólica offshore... vamos a hacer materiales estratégicos, otra de las encomiendas de la presidenta”, anunció. Es urgente refinanciar la deuda. En este sentido, Sheinbaum ha planteado la posibilidad de que la compañía le ‘entre’ a nuevos negocios como la extracción de litio o los autos eléctricos.
Se requiere trabajar en conjunto con la Secretaría de Energía y la Secretaría de Hacienda. Óscar Ocampo, coordinador de Energía y Medio Ambiente del IMCO, ha señalado que preocupa que no se reconozca que Pemex es la petrolera más endeudada del mundo, con pasivos que ascienden a MXN 1800M y compromisos de pago que podrían poner en peligro su viabilidad a largo plazo. “El próximo año, Pemex tendrá que cubrir el 25 % de esta deuda, lo que inevitablemente requerirá un apoyo continuo del Gobierno federal”.
El reto del ingeniero y la nueva administración es gigantesco.
Víctor Rodríguez Padilla, académico experto en temas energéticos, será el director general de la estatal Petróleos Mexicanos (Pemex). La presidenta electa, Claudia Sheinbaum, lo anunció el pasado día 26.
El funcionario –de perfil técnico– viene de la academia para dirigir la estatal. Físico y maestro en Ingeniería Energética por la UNAM, tiene un doctorado en Economía de la Energía por la Universidad de Grenoble (Francia). Fue profesor invitado en la Universidad de California en San Diego, en el Instituto de las Américas en California, y universidades en Bolivia y Colombia.
Ha sido asesor en el Congreso, así como en varias instituciones mexicanas y regionales. Su trayectoria de 42 años en el sector le otorgan experiencia en organización y regulación, contratos, régimen fiscal, seguridad y transición energéticas, petróleo, gas natural y electricidad.
Para el subdirector de Análisis Económico y Bursátil de CIBanco (institución de banca múltiple), James Salazar, el nombramiento “gustó a medias” en el mercado. La razón: aunque el perfil es más académico y técnico, no cuenta necesariamente “con la experiencia como para manejar un tema tan complejo, como el de las dificultades financieras” de la petrolera.
Durante su presentación, Rodríguez Padilla hizo referencia a la enorme deuda de Pemex de hasta USD 130 000M, que se redujo a 94 000M, según sus palabras. Minimizó los señalamientos sobre la situación financiera de Pemex. Tras calificarlos de “exagerados” aseguró que la empresa no enfrenta las dificultades que se le atribuyen.
Pemex está financiada por el presupuesto que le asigna el Gobierno y no por utilidades. A decir de varios especialistas, debido a esta razón se encuentra en “un punto incierto y preocupante”. Cerró el primer trimestre de 2024 con una deuda financiera bruta de más de USD 100 000M, de acuerdo con un reporte del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO). Y en el segundo, registró su peor pérdida desde el covid. Lleva cargando este pasivo desde hace varios años pese a la inversión directa del Gobierno.
Rodríguez Padilla ‘hereda’ una empresa con finanzas críticas. Es imperioso revivir la producción que se ha desplomado a la mitad de su nivel máximo de hace 20 años. Sin embargo, en una crítica a lo que llamó los “gobiernos neoliberales” afirmó que “nos entregaron una empresa devastada, en ruinas, con refinerías cayéndose a pedazos que afortunadamente se han restituido y estamos en proceso de aumentar su capacidad”. Para ver que eso no es exacto baste el ejemplo de la refinería Dos Bocas (ahora complejo Olmeca). Inaugurada en 2022 tras varios retrasos, comenzó a operar en julio. En su primer mes procesó 65 046 barriles de petróleo crudo por día, de acuerdo con el informe mensual de Pemex. Una cifra muy distante de la capacidad de procesamiento de 340 000 barriles diarios anunciada por el Ejecutivo para ese complejo.
De igual modo, queda latente la inquietud de otros comentarios “populistas” emitidos por el próximo funcionario. Estos están en la línea de la administración de AMLO, como han sido los mensajes de la soberanía y defensa energéticas del país.
De hecho, los bonos de PEMEX denominados en dólares y con vencimientos en 2047, mostraron una contracción de 1.29 % en los primeros días desde que se diera a conocer su nombramiento.
El futuro director dijo que mantendrán la producción en 1.8M de barriles por día, una de las instrucciones de Sheinbaum. Prometió, asimismo, que la estatal dará un giro hacia la sostenibilidad. Su objetivo es transformar Pemex en una empresa verde.
Aseguró que Pemex continuará con la producción de petróleo y gas, pero también apostará por las energías renovables. “…Vamos a hacer energía eólica, energía solar, eólica offshore... vamos a hacer materiales estratégicos, otra de las encomiendas de la presidenta”, anunció. Es urgente refinanciar la deuda. En este sentido, Sheinbaum ha planteado la posibilidad de que la compañía le ‘entre’ a nuevos negocios como la extracción de litio o los autos eléctricos.
Se requiere trabajar en conjunto con la Secretaría de Energía y la Secretaría de Hacienda. Óscar Ocampo, coordinador de Energía y Medio Ambiente del IMCO, ha señalado que preocupa que no se reconozca que Pemex es la petrolera más endeudada del mundo, con pasivos que ascienden a MXN 1800M y compromisos de pago que podrían poner en peligro su viabilidad a largo plazo. “El próximo año, Pemex tendrá que cubrir el 25 % de esta deuda, lo que inevitablemente requerirá un apoyo continuo del Gobierno federal”.
El reto del ingeniero y la nueva administración es gigantesco.
