Política
Política
Empresa
Empresa
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial
Videos
Videos

Análisis: Claudia Sheinbaum, la primera presidenta de Norteamérica

Ilustración por Gabo®
Rafael P. Palomo
03 de junio, 2024

La victoria de Sheinbaum marca el inicio del periodo de la hegemonía de MORENA en la política mexicana.  

Es noticia. Con 58 % de votos a la hora de cierre, Claudia Sheinbaum (MORENA, izquierda) se ha convertido en la nueva presidenta de México. Su rival, Xóchitl Gálvez, (Fuerza y Corazón por México, atrapalotodo) no estuvo a la altura de la ocasión, obteniendo solamente un 28 % de votos. MORENA se proyecta como ganador, también, en ambas cámaras del Congreso de la Unión.

  • Luego del dedazo de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), su sucesora continuará con los planes del actual presidente.  

    SUSCRÍBASE A NUESTRO NEWSLETTER DE POLÍTICA
  • MORENA se ha afianzado, por un sexenio más, como la fuerza política dominante en México a nivel ejecutivo y legislativo.  

Por qué importa. MORENA tendrá todo para gobernar. Si bien la oposición no ha desaparecido, la izquierda ha logrado aferrarse al poder a la manera más clásica de la política mexicana. Como en los tiempos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el actual partido de gobierno ejerce el poder desde el Ejecutivo, con un programa clientelar que le permite un control territorial importante. En México importa más el dominio de la figura presidencial sobre todos los espacios de poder, que un programa ideológico como tal.  

  • Como tradicionalmente se describía al PRI, es la dictadura perfecta.  

  • Una dictadura que, dentro de un espacio democrático, es capaz de dominar gubernaturas –incluso medios de comunicación–, permitiéndole al gobierno una capacidad ejecutora de la que carece casi cualquier otro país. 

Sí, pero. Sheinbaum es distinta a AMLO. Si bien su sexenio promete total continuidad del proyecto del todavía presidente, su delfina no tiene la habilidad de negociación ni el carisma del político más influyente de México en este siglo. AMLO es un político a la antigua, capaz de olvidarse de su ideología en aspectos clave para asegurar su supervivencia en el gobierno. Su política económica, a pesar de basarse en programas sociales clientelares para afianzar su poder, ha sido relativamente agradable al empresariado mexicano. 

  • Los inversionistas ven con buenos ojos la estabilidad que la continuidad les brinda; no solo porque inicialmente no mucho cambiará, sino porque están conformes con el panorama macroeconómico que AMLO ha generado durante su sexenio.  

  • Sheinbaum, no obstante, ha sido siempre una política mucho más ideológica, con una gran influencia de la izquierda woke anglosajona.  

En el radar. La presidenta electa deberá modificar mucho su manera de hacer política. Si quiere asegurar el futuro de MORENA en el poder, tendrá que entender que la manera de manejar el Gobierno mexicano es muy distinta al gobierno de la Ciudad de México. Su capacidad para llegar a acuerdos, sacrificando sus creencias personales, será vital para crecer la influencia que predecesor ha sido capaz de ejercer.  

El balance. Sheinbaum tiene todo a su favor. Su poco carisma ha sido una debilidad que prácticamente no le ha afectado. De momento, ha vivido de la popularidad de AMLO, pero seis años son mucho tiempo. La oposición fue incapaz de explotar la frialdad de Sheinbaum y su corte chilango, en un país donde la política de provincia sigue siendo fundamental. No hubo rival que pudiera contrarrestar la unción del presidente. La victoria de Claudia Sheinbaum se selló con el dedazo de AMLO.  

  • Sheinbaum enfrenta una presidencia cuyo reto es construir encima de lo logrado por López Obrador, terminando proyectos estancados como sus reformas constitucionales y la construcción del famoso Tren Maya.

  • Si bien contará con mayoría legislativa, tendrá que usar el músculo político de MORENA para negociar e impulsar las reformas consitucionales propuestas por AMLO, que requieren de dos tercios de los votos en ambas cámaras. La capacidad de formar y mantener alianzas podría darle al partido oficial la mayoría absoluta.

  • No deberá perder de foco la profunda influencia —cada vez mayor— del narco y el despunte de violencia en México, una bomba de tiempo que debe ser desarticulada. 

SUSCRÍBASE A NUESTRO NEWSLETTER DE POLÍTICA

Análisis: Claudia Sheinbaum, la primera presidenta de Norteamérica

Ilustración por Gabo®
Rafael P. Palomo
03 de junio, 2024

La victoria de Sheinbaum marca el inicio del periodo de la hegemonía de MORENA en la política mexicana.  

Es noticia. Con 58 % de votos a la hora de cierre, Claudia Sheinbaum (MORENA, izquierda) se ha convertido en la nueva presidenta de México. Su rival, Xóchitl Gálvez, (Fuerza y Corazón por México, atrapalotodo) no estuvo a la altura de la ocasión, obteniendo solamente un 28 % de votos. MORENA se proyecta como ganador, también, en ambas cámaras del Congreso de la Unión.

  • Luego del dedazo de Andrés Manuel López Obrador (AMLO), su sucesora continuará con los planes del actual presidente.  

    SUSCRÍBASE A NUESTRO NEWSLETTER DE POLÍTICA
  • MORENA se ha afianzado, por un sexenio más, como la fuerza política dominante en México a nivel ejecutivo y legislativo.  

Por qué importa. MORENA tendrá todo para gobernar. Si bien la oposición no ha desaparecido, la izquierda ha logrado aferrarse al poder a la manera más clásica de la política mexicana. Como en los tiempos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), el actual partido de gobierno ejerce el poder desde el Ejecutivo, con un programa clientelar que le permite un control territorial importante. En México importa más el dominio de la figura presidencial sobre todos los espacios de poder, que un programa ideológico como tal.  

  • Como tradicionalmente se describía al PRI, es la dictadura perfecta.  

  • Una dictadura que, dentro de un espacio democrático, es capaz de dominar gubernaturas –incluso medios de comunicación–, permitiéndole al gobierno una capacidad ejecutora de la que carece casi cualquier otro país. 

Sí, pero. Sheinbaum es distinta a AMLO. Si bien su sexenio promete total continuidad del proyecto del todavía presidente, su delfina no tiene la habilidad de negociación ni el carisma del político más influyente de México en este siglo. AMLO es un político a la antigua, capaz de olvidarse de su ideología en aspectos clave para asegurar su supervivencia en el gobierno. Su política económica, a pesar de basarse en programas sociales clientelares para afianzar su poder, ha sido relativamente agradable al empresariado mexicano. 

  • Los inversionistas ven con buenos ojos la estabilidad que la continuidad les brinda; no solo porque inicialmente no mucho cambiará, sino porque están conformes con el panorama macroeconómico que AMLO ha generado durante su sexenio.  

  • Sheinbaum, no obstante, ha sido siempre una política mucho más ideológica, con una gran influencia de la izquierda woke anglosajona.  

En el radar. La presidenta electa deberá modificar mucho su manera de hacer política. Si quiere asegurar el futuro de MORENA en el poder, tendrá que entender que la manera de manejar el Gobierno mexicano es muy distinta al gobierno de la Ciudad de México. Su capacidad para llegar a acuerdos, sacrificando sus creencias personales, será vital para crecer la influencia que predecesor ha sido capaz de ejercer.  

El balance. Sheinbaum tiene todo a su favor. Su poco carisma ha sido una debilidad que prácticamente no le ha afectado. De momento, ha vivido de la popularidad de AMLO, pero seis años son mucho tiempo. La oposición fue incapaz de explotar la frialdad de Sheinbaum y su corte chilango, en un país donde la política de provincia sigue siendo fundamental. No hubo rival que pudiera contrarrestar la unción del presidente. La victoria de Claudia Sheinbaum se selló con el dedazo de AMLO.  

  • Sheinbaum enfrenta una presidencia cuyo reto es construir encima de lo logrado por López Obrador, terminando proyectos estancados como sus reformas constitucionales y la construcción del famoso Tren Maya.

  • Si bien contará con mayoría legislativa, tendrá que usar el músculo político de MORENA para negociar e impulsar las reformas consitucionales propuestas por AMLO, que requieren de dos tercios de los votos en ambas cámaras. La capacidad de formar y mantener alianzas podría darle al partido oficial la mayoría absoluta.

  • No deberá perder de foco la profunda influencia —cada vez mayor— del narco y el despunte de violencia en México, una bomba de tiempo que debe ser desarticulada. 

¿Quiere recibir notificaciones de alertas?