EL TIPO DE CAMBIO DE HOY ES DE: Desde 2014 hasta la fecha, Guatemala ha ocupado uno de los primeros lugares como el país en donde emprender un negocio es considerado como la opción más deseable para generar ingresos. No obstante, son resilientes a las restricciones existentes en el entorno en el que operan.
En perspectiva. El Centro de Emprendimiento Kirzner, presentó el pasado martes 10 de septiembre el décimo cuarto Reporte Nacional de Emprendimiento para Guatemala (GEM, en inglés). El informe contiene los principales resultados de una investigación que analiza características de los emprendedores, con una representatividad estadística a nivel nacional.
- A diferencia de países más desarrollados que generan nuevos negocios más industriales, la transferencia de conocimientos y tecnología resultó una de las debilidades del ambiente emprendedor en Guatemala.
- Uno de los aspectos peor calificados es el apoyo a la innovación (2.4/10).
- En su mayoría los emprendimientos van orientados al consumo. Es decir, venta de comida, ropa, fruta y verdura, abarrotería, venta por catálogo, librería. Productos sin un valor agregado.
Entre líneas. Un factor que podría influir en el panorama son los productos financieros poco sofisticados. Los expertos entrevistados en la Encuesta Nacional de Expertos consideran que en Guatemala son limitadas las fuentes de financiamiento para negocios nuevos y en proceso de creación.
- Se percibe con mayor disponibilidad la fuente de financiamiento calificada, estos expertos consideraron que el financiamiento proveniente de inversionistas informales —familiares y amigos— (5/10).
- Mientras que, el financiamiento a través de la bolsa de valores como la menos disponible (1.3 puntos).
- “Aunque ha habido nuevas propuestas de entidades financieras, fintechs y otros actores, todavía existe bastante espacio para innovar en el desarrollo de productos financieros que se ajusten al perfil y a las necesidades”, detalla el escrito.
Visto y no visto. Otro aspecto que detalla el último informe es que la mayoría de los negocios no se registra. En su mayoría detallan que no ve el beneficio de hacerlo (51.2 %), le siguen las razones de los costos altos de operar formalmente (14.4) y no saber cómo hacerlo (18.6).
- El problema es que los números sigue subiendo. De 2019 a 2021 las tasa de informalidad en emprendimiento rondaban del 58 al 60.5%.
- Las razones que detallaron los emprendedores fueron no ver un retorno. Es decir, no perciben mejora en la calidad de los servicios, en la infraestructura, seguridad o protección adicional, ni más clientes.
- El 70.6 % de los emprendimientos en fases tempranas opera de manera informal, pero a medida que los negocios superan los 3.5 años de operación la tasa de informalidad se reduce al 42.3 %.
Datos. De los 45 países participantes, Guatemala ocupa la segunda posición como el país en donde una mayor porción de su población adulta (18-64 años) es dueña y administradora de un negocio de reciente creación (menos de 42 meses de estar funcionando).
- Actualmente, 3.2M de guatemaltecos tienen un negocio de reciente creación (32.4 % de la población adulta).
- Los negocios que se desarrollan tienen las siguientes características: El 42.6 % inicia con una inversión inicial inferior a cinco mil quetzales y el 56.5 % no genera ningún empleo.
- Asimismo, casi 8 de cada 10 negocios pertenecen al sector económico del consumo (79 %) y el 82 % atiende clientes que se ubican en la comunidad o municipio en donde vive el emprendedor.
Balance. Frente a la llegada de un nuevo gobierno, es necesario recordar la relevancia de la actividad emprendedora en Guatemala. Se debe responder a las necesidades como la seguridad ciudadana, calidad de la infraestructura, simplicidad para operar formalmente, y generar apertura para nuevos modelos educativos. Esto con el objetivo de brindar educación de calidad para las nuevas generaciones, y la capacitación y acceso a herramientas para potenciar el desempeño de los emprendedores y de sus negocios, resalta el GEM.
