José Antonio Kast toma ventaja para una segunda vuelta marcada por el giro a la derecha en Chile y la región
Chile entró en una de las elecciones más importantes de su historia reciente con José Antonio Kast en posición favorable para la segunda vuelta del 14 de diciembre. El exdiputado, referente de la derecha y defensor de políticas de orden y migración estricta, se medirá ante Jeannette Jara, figura del Partido Comunista y exministra del presidente Gabriel Boric. Ninguno logró superar el 50% en la primera ronda.
El resultado del domingo confirmó un desplazamiento contundente del electorado hacia propuestas de derecha, con casi el 70% de los votos repartidos entre candidatos conservadores y de centro derecha, reflejo del malestar por la inseguridad, la inmigración irregular y el deterioro económico.
Un candidato de mano dura que capitaliza el descontento ciudadano
Kast, abogado y fundador del Partido Republicano, consolidó su espacio con un discurso centrado en la lucha contra el crimen organizado y las políticas económicas socialistas que han comenzado a surtir efecto en la población. Obtuvo cerca del 24% de los votos, impulsado por jóvenes y sectores preocupados por la pérdida de seguridad en un país que históricamente se consideraba uno de los más estables de Latinoamérica.
Su contrincante, la comunista Jeannette Jara, alcanzó un 27% con un mensaje enfocado en ampliar programas sociales y la redistribución de la riqueza, haciéndose famosa por evitar condenar a la dictadura de Cuba. A pesar de llegar primera, su ventaja resultó más ajustada de lo previsto para el oficialismo.
La derecha domina el mapa y concentra los votos decisivos
El avance de Kast se explica también por el desempeño del resto de la derecha. El economista Franco Parisi sorprendió con casi un 20% y un voto atrapalotodo y antiestablishment que puede definir el balotaje. Johannes Kaiser, diputado libertario, sumó otro 14% con una agenda más marcada en materia de seguridad, economía y migración. Por último, la candidata tradicional de la centroderecha, Evelyn Matthei, quedó relegada con 12.5%.
Matthei y Kaiser anunciaron su respaldo inmediato a Kast, fortaleciendo el bloque opositor. Parisi, sin comprometer apoyo explícito, dijo que los candidatos deberían ganarse el voto de su coalición.
Un giro regional que fortalece a los proyectos de derecha
La tendencia chilena se inscribe en un movimiento regional más amplio. En países como Argentina, Ecuador, El Salvador, Panamá y Bolivia, las urnas han mostrado una reacción contra los gobiernos de izquierda que emergieron del financiamiento que el chavismo venezolano les brindó desde inicios de siglo. El avance de proyectos conservadores coincide con una economía regional estancada y con sociedades agotadas de altos precios, inseguridad, criminalidad destada, poca creación de empleo y promesas incumplidas.
Chile, mayor productor mundial de cobre y clave para la transición energética global, vuelve a colocarse en el centro del tablero geopolítico latinoamericano. Un eventual gobierno de Kast probablemente reforzaría los lazos con Estados Unidos en un contexto de creciente competencia con China por influencia en la región.
José Antonio Kast toma ventaja para una segunda vuelta marcada por el giro a la derecha en Chile y la región
Chile entró en una de las elecciones más importantes de su historia reciente con José Antonio Kast en posición favorable para la segunda vuelta del 14 de diciembre. El exdiputado, referente de la derecha y defensor de políticas de orden y migración estricta, se medirá ante Jeannette Jara, figura del Partido Comunista y exministra del presidente Gabriel Boric. Ninguno logró superar el 50% en la primera ronda.
El resultado del domingo confirmó un desplazamiento contundente del electorado hacia propuestas de derecha, con casi el 70% de los votos repartidos entre candidatos conservadores y de centro derecha, reflejo del malestar por la inseguridad, la inmigración irregular y el deterioro económico.
Un candidato de mano dura que capitaliza el descontento ciudadano
Kast, abogado y fundador del Partido Republicano, consolidó su espacio con un discurso centrado en la lucha contra el crimen organizado y las políticas económicas socialistas que han comenzado a surtir efecto en la población. Obtuvo cerca del 24% de los votos, impulsado por jóvenes y sectores preocupados por la pérdida de seguridad en un país que históricamente se consideraba uno de los más estables de Latinoamérica.
Su contrincante, la comunista Jeannette Jara, alcanzó un 27% con un mensaje enfocado en ampliar programas sociales y la redistribución de la riqueza, haciéndose famosa por evitar condenar a la dictadura de Cuba. A pesar de llegar primera, su ventaja resultó más ajustada de lo previsto para el oficialismo.
La derecha domina el mapa y concentra los votos decisivos
El avance de Kast se explica también por el desempeño del resto de la derecha. El economista Franco Parisi sorprendió con casi un 20% y un voto atrapalotodo y antiestablishment que puede definir el balotaje. Johannes Kaiser, diputado libertario, sumó otro 14% con una agenda más marcada en materia de seguridad, economía y migración. Por último, la candidata tradicional de la centroderecha, Evelyn Matthei, quedó relegada con 12.5%.
Matthei y Kaiser anunciaron su respaldo inmediato a Kast, fortaleciendo el bloque opositor. Parisi, sin comprometer apoyo explícito, dijo que los candidatos deberían ganarse el voto de su coalición.
Un giro regional que fortalece a los proyectos de derecha
La tendencia chilena se inscribe en un movimiento regional más amplio. En países como Argentina, Ecuador, El Salvador, Panamá y Bolivia, las urnas han mostrado una reacción contra los gobiernos de izquierda que emergieron del financiamiento que el chavismo venezolano les brindó desde inicios de siglo. El avance de proyectos conservadores coincide con una economía regional estancada y con sociedades agotadas de altos precios, inseguridad, criminalidad destada, poca creación de empleo y promesas incumplidas.
Chile, mayor productor mundial de cobre y clave para la transición energética global, vuelve a colocarse en el centro del tablero geopolítico latinoamericano. Un eventual gobierno de Kast probablemente reforzaría los lazos con Estados Unidos en un contexto de creciente competencia con China por influencia en la región.
EL TIPO DE CAMBIO DE HOY ES DE: