Durante LINKS 2025, el exdirectivo de Red Bull Racing, Mark Gallagher, ofreció una conferencia que reconfiguró la visión empresarial en América Latina. Al conectar la Fórmula 1 con los retos corporativos contemporáneos, presentó un modelo donde la estrategia, los datos y la cultura tecnológica reemplazan a la velocidad como eje central del liderazgo.
Qué destacar. Gallagher elevó la Fórmula 1 a metáfora empresarial. Su enfoque resonó entre ejecutivos, CIOs y líderes de transformación digital de toda la región.
- Detalló que detrás de cada monoplaza hay cientos de especialistas trabajando con tecnología aeroespacial, automotriz y digital.
- “No estamos en el negocio de las carreras de autos”, afirmó, destacando el enfoque sistémico que caracteriza al sector.
- A su juicio, el éxito no depende del dinero ni de los nombres en la parrilla, sino de una cultura de innovación sólida y transversal.
Detrás de escena. Una de las historias más contundentes fue la de Red Bull Racing, una firma sin trayectoria en automovilismo que en apenas cinco años superó a escuderías históricas como Ferrari y Mercedes.
- El triunfo, explicó Gallagher, nació de la visión de Dietrich Mateschitz, quien apostó por romper esquemas: priorizó la disrupción tecnológica y el talento emergente. En lugar de buscar al piloto perfecto, Red Bull lo creó.
- Max Verstappen fue firmado a los 13 años y preparado desde simuladores antes de debutar en pista.
- “La ventaja de Red Bull no fue el dinero. Fue una cultura basada en la curiosidad, la tecnología y el pensamiento a largo plazo”, sintetizó.
Datos clave. La Fórmula 1 actual se mueve al ritmo de millones de simulaciones, decisiones en tiempo real y ajustes milimétricos sustentados en datos. El modelo operativo ha dejado atrás la improvisación.
- Según Gallagher, cada equipo realiza entre 2.5 y 3 millones de simulaciones por carrera, apoyado por centros remotos de estrategia. Las paradas en boxes, antes de 30 segundos, hoy no superan los dos, gracias a entrenamientos precisos y mejora continua.
- “Somos tan rápidos como nuestra persona más lenta”, citó.
- Ante crisis globales —financieras, sanitarias o energéticas—, la F1 ha sabido adaptarse. Escuderías como McLaren, Williams o Mercedes colaboran con sectores como salud, defensa, movilidad urbana y energías limpias. “La IA no es solo una herramienta. Es una nueva forma de operar”, concluyó.
Lo que sigue. Como anfitrión de LINKS 2025, Liberty Networks renovó su compromiso con la transformación digital de América Latina. El foro se consolidó como espacio estratégico para repensar el liderazgo.
- El exdirectivo llamó a pensar más allá del corto plazo y construir culturas organizacionales centradas en la confianza, la apertura y la ejecución sostenida. Escuderías como
- Mercedes hoy exportan capacidades analíticas a industrias clave en la región.
- “La IA es una nueva forma de operar”, insistió dejando un mensaje claro: adaptarse no es suficiente, hay que anticiparse.
Durante LINKS 2025, el exdirectivo de Red Bull Racing, Mark Gallagher, ofreció una conferencia que reconfiguró la visión empresarial en América Latina. Al conectar la Fórmula 1 con los retos corporativos contemporáneos, presentó un modelo donde la estrategia, los datos y la cultura tecnológica reemplazan a la velocidad como eje central del liderazgo.
Qué destacar. Gallagher elevó la Fórmula 1 a metáfora empresarial. Su enfoque resonó entre ejecutivos, CIOs y líderes de transformación digital de toda la región.
- Detalló que detrás de cada monoplaza hay cientos de especialistas trabajando con tecnología aeroespacial, automotriz y digital.
- “No estamos en el negocio de las carreras de autos”, afirmó, destacando el enfoque sistémico que caracteriza al sector.
- A su juicio, el éxito no depende del dinero ni de los nombres en la parrilla, sino de una cultura de innovación sólida y transversal.
Detrás de escena. Una de las historias más contundentes fue la de Red Bull Racing, una firma sin trayectoria en automovilismo que en apenas cinco años superó a escuderías históricas como Ferrari y Mercedes.
- El triunfo, explicó Gallagher, nació de la visión de Dietrich Mateschitz, quien apostó por romper esquemas: priorizó la disrupción tecnológica y el talento emergente. En lugar de buscar al piloto perfecto, Red Bull lo creó.
- Max Verstappen fue firmado a los 13 años y preparado desde simuladores antes de debutar en pista.
- “La ventaja de Red Bull no fue el dinero. Fue una cultura basada en la curiosidad, la tecnología y el pensamiento a largo plazo”, sintetizó.
Datos clave. La Fórmula 1 actual se mueve al ritmo de millones de simulaciones, decisiones en tiempo real y ajustes milimétricos sustentados en datos. El modelo operativo ha dejado atrás la improvisación.
- Según Gallagher, cada equipo realiza entre 2.5 y 3 millones de simulaciones por carrera, apoyado por centros remotos de estrategia. Las paradas en boxes, antes de 30 segundos, hoy no superan los dos, gracias a entrenamientos precisos y mejora continua.
- “Somos tan rápidos como nuestra persona más lenta”, citó.
- Ante crisis globales —financieras, sanitarias o energéticas—, la F1 ha sabido adaptarse. Escuderías como McLaren, Williams o Mercedes colaboran con sectores como salud, defensa, movilidad urbana y energías limpias. “La IA no es solo una herramienta. Es una nueva forma de operar”, concluyó.
Lo que sigue. Como anfitrión de LINKS 2025, Liberty Networks renovó su compromiso con la transformación digital de América Latina. El foro se consolidó como espacio estratégico para repensar el liderazgo.
- El exdirectivo llamó a pensar más allá del corto plazo y construir culturas organizacionales centradas en la confianza, la apertura y la ejecución sostenida. Escuderías como
- Mercedes hoy exportan capacidades analíticas a industrias clave en la región.
- “La IA es una nueva forma de operar”, insistió dejando un mensaje claro: adaptarse no es suficiente, hay que anticiparse.