Finaliza el año 2018 y podemos reflexionar sobre todo lo ocurrido durante este tiempo, cosas buenas y no tan buenas en la vida de cada uno de nosotros, pero también pensamos en lo que sucedió a la sociedad guatemalteca y de igual manera podemos ver que han ocurrido días oscuros para un pueblo que aclama conseguir equidad e igualdad y con esto establecer un modelo de desarrollo estable para todos.
Si vemos hacia atrás nos daremos cuenta deque la realidad no ha cambiado mucho porque seguimos teniendo altos niveles endesnutrición de nuestros niños, además la salud es un tema complicado en losservicios que se prestan a la población, los niveles de seguridad a todo nivelsiguen siendo materia pendiente, la migración se agudiza con los dramassociales y no digamos la polarización que se da un banquete con la división depensamientos político ideológico.
Por eso es que 2019 se presenta conaugurios de ser un año sumamente difícil en cuanto a conflictividad en todoslos ámbitos, esto a raíz de un panorama que para muchos es incierto como es eltema electoral porque estamos a pocos días de arrancar una nueva contiendaelectoral con cambios a la ley y con un Tribunal Supremo Electoral con masdudas que explicaciones de como funcionara el proceso con las nuevas reglas ycomo hacer la fiscalización necesaria para hacer un proceso transparente.
Esta conflictividad electoral que inicia amediados del mes enero será un bombardeo de mensajes que claro seguiránbuscando polarizar y revolver las aguas y como lo establecen la experiencia “enrio revuelta ganancia de pescadores”, por eso es que nos tenemos que detener apensar quienes serán los que quieren revolver las aguas y que ganancia van aobtener de esto y hacia donde nos pueden llevar como sociedad.
El acontecer político social en este 2019estará en su máximo esplendor tendremos escenarios únicos, uno de ellos la granexpectativa que genera el regreso del comisionado Iván Velásquez y lo quesucederá si esto ocurre y qué determinara el ejecutivo que tiene una luchaabierta contra CICIG.
Todo esto solo nos dará un inicio de lo quecreo es el preámbulo con un toque único para este año ya que serán los tresorganismos del Estado que cambiaran y que se podría establecer como unacontienda general en diferentes momentos del 2019, lo que si es cierto quedentro de este año debemos estar más atentos que nunca.
Creo que la unidad será clave, porque sepresentarán oportunidades que aparecerán como en toda crisis para solventar losproblemas existentes, por supuesto, nosotros los guatemaltecos y guatemaltecasque deseamos mas que nada cambios profundos, ante un lamentable y triste dramade migración y pobreza, solo debemos unirnos más.
Es por ello que creo sin dudarlo que 2019 será una época de desafío para un país en donde buscamos crecer y que todos tengamos las mismas oportunidades de desarrollarnos, y el estar atentos tanto al acontecer social, político y electoral será una cuestión de interés nacional esperando que se rompan las cadenas del autoritarismo y las malas prácticas como la corrupción y la impunidad. A pesar de todo no dudo en que debemos ver con optimismo al 2019, creo que es lo mejor que podemos hacer verlo desde una óptica concentrada en aprovecharla al máximo y sacar lo mejor para todos, es un contexto complicado pero deseo de todo corazón que sea un año bueno y que todos tengan la oportunidad de equidad e igualdad para salir adelante.
República es ajena a la opinión expresada en este artículo
Finaliza el año 2018 y podemos reflexionar sobre todo lo ocurrido durante este tiempo, cosas buenas y no tan buenas en la vida de cada uno de nosotros, pero también pensamos en lo que sucedió a la sociedad guatemalteca y de igual manera podemos ver que han ocurrido días oscuros para un pueblo que aclama conseguir equidad e igualdad y con esto establecer un modelo de desarrollo estable para todos.
Si vemos hacia atrás nos daremos cuenta deque la realidad no ha cambiado mucho porque seguimos teniendo altos niveles endesnutrición de nuestros niños, además la salud es un tema complicado en losservicios que se prestan a la población, los niveles de seguridad a todo nivelsiguen siendo materia pendiente, la migración se agudiza con los dramassociales y no digamos la polarización que se da un banquete con la división depensamientos político ideológico.
Por eso es que 2019 se presenta conaugurios de ser un año sumamente difícil en cuanto a conflictividad en todoslos ámbitos, esto a raíz de un panorama que para muchos es incierto como es eltema electoral porque estamos a pocos días de arrancar una nueva contiendaelectoral con cambios a la ley y con un Tribunal Supremo Electoral con masdudas que explicaciones de como funcionara el proceso con las nuevas reglas ycomo hacer la fiscalización necesaria para hacer un proceso transparente.
Esta conflictividad electoral que inicia amediados del mes enero será un bombardeo de mensajes que claro seguiránbuscando polarizar y revolver las aguas y como lo establecen la experiencia “enrio revuelta ganancia de pescadores”, por eso es que nos tenemos que detener apensar quienes serán los que quieren revolver las aguas y que ganancia van aobtener de esto y hacia donde nos pueden llevar como sociedad.
El acontecer político social en este 2019estará en su máximo esplendor tendremos escenarios únicos, uno de ellos la granexpectativa que genera el regreso del comisionado Iván Velásquez y lo quesucederá si esto ocurre y qué determinara el ejecutivo que tiene una luchaabierta contra CICIG.
Todo esto solo nos dará un inicio de lo quecreo es el preámbulo con un toque único para este año ya que serán los tresorganismos del Estado que cambiaran y que se podría establecer como unacontienda general en diferentes momentos del 2019, lo que si es cierto quedentro de este año debemos estar más atentos que nunca.
Creo que la unidad será clave, porque sepresentarán oportunidades que aparecerán como en toda crisis para solventar losproblemas existentes, por supuesto, nosotros los guatemaltecos y guatemaltecasque deseamos mas que nada cambios profundos, ante un lamentable y triste dramade migración y pobreza, solo debemos unirnos más.
Es por ello que creo sin dudarlo que 2019 será una época de desafío para un país en donde buscamos crecer y que todos tengamos las mismas oportunidades de desarrollarnos, y el estar atentos tanto al acontecer social, político y electoral será una cuestión de interés nacional esperando que se rompan las cadenas del autoritarismo y las malas prácticas como la corrupción y la impunidad. A pesar de todo no dudo en que debemos ver con optimismo al 2019, creo que es lo mejor que podemos hacer verlo desde una óptica concentrada en aprovecharla al máximo y sacar lo mejor para todos, es un contexto complicado pero deseo de todo corazón que sea un año bueno y que todos tengan la oportunidad de equidad e igualdad para salir adelante.
República es ajena a la opinión expresada en este artículo