En la audiencia de primera declaración por el caso Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ), se reprodujo el audio como anticipo de prueba de Juan Carlos Monzón, exsecretario privado de la exvicepresidenta Roxana Baldetti, donde se revela excentricidad con la que fue gastado el millonario soborno que recibió el exbinomio presidencial.
Según Monzón Otto Pérez Molina y Baldetti gastaron unos US$4 millones productos del soborno que había hecho TCQ, en yate, casas, joyas y ropa. Así también se reprodujo un audio del empresario Guillermo Enrique Mohl Salazar, testigo protegido por el caso TCQ, quien confirmo que en entre el 2012 y 2014, los entonces gobernantes adquirieron lanchas lujosas en su negocio.
De acuerdo con las declaraciones de los testigos el exmandatario además “gastó 37 mil dólares en equipo de pesca para su nuevo yate”, sin embargo, indicaron que el entonces Presidente fue el que menos gasto, él siempre tenía su dinero guardado.
Salazar dijo que Juan Carlos Monzón acudió en mayo a comprar una lancha pequeña para Baldetti, y era acompañado “de la señorita Beltranena”. Mientras Pérez Molina habría comprado una lancha más grande de 27 pies y dos motores con un costo aproximadamente de Q1.5 millones los cuales fueron cancelado con dos cheques a nombre de la Constructora La Montaña S.A.
Pérez Molina durante el 2014 adquirió una lancha más grande por la cual canceló Q2 millones, en está ocasión fueron tres pagos en efectivo Q683 mil en billetes de Q100, según lo relato Mohl, los cuales fueron trasladados en un camión de la empresa Fort Knox, propiedad de Jonathan Chévez.
Según los testimonios fue Luisa de Pérez, nuera del exmandatario, quien giró instrucciones de cómo se debía emitir una de las facturas de dichas compras. Monzón dijo que la exvicemandataria pedía que el dinero producto de los sobornos fuera entregado en la Casa Presidencial, “fue en el Callejón Manchén donde ingresaba el dinero para resguardarlo en la Vicepresidencia” dijo, por ser intermediario él recibió una US$ 260 mil
Entre la repartición del dinero también figuraba el exinterventor de la Porturia Quetzal, Allan Marroquín y a quien Baldetti intentó sacar del grupo que recibía dinero del negocio anómalo, lo que creó roces dentro de la organización criminal.
En la audiencia de primera declaración por el caso Terminal de Contenedores Quetzal (TCQ), se reprodujo el audio como anticipo de prueba de Juan Carlos Monzón, exsecretario privado de la exvicepresidenta Roxana Baldetti, donde se revela excentricidad con la que fue gastado el millonario soborno que recibió el exbinomio presidencial.
Según Monzón Otto Pérez Molina y Baldetti gastaron unos US$4 millones productos del soborno que había hecho TCQ, en yate, casas, joyas y ropa. Así también se reprodujo un audio del empresario Guillermo Enrique Mohl Salazar, testigo protegido por el caso TCQ, quien confirmo que en entre el 2012 y 2014, los entonces gobernantes adquirieron lanchas lujosas en su negocio.
De acuerdo con las declaraciones de los testigos el exmandatario además “gastó 37 mil dólares en equipo de pesca para su nuevo yate”, sin embargo, indicaron que el entonces Presidente fue el que menos gasto, él siempre tenía su dinero guardado.
Salazar dijo que Juan Carlos Monzón acudió en mayo a comprar una lancha pequeña para Baldetti, y era acompañado “de la señorita Beltranena”. Mientras Pérez Molina habría comprado una lancha más grande de 27 pies y dos motores con un costo aproximadamente de Q1.5 millones los cuales fueron cancelado con dos cheques a nombre de la Constructora La Montaña S.A.
Pérez Molina durante el 2014 adquirió una lancha más grande por la cual canceló Q2 millones, en está ocasión fueron tres pagos en efectivo Q683 mil en billetes de Q100, según lo relato Mohl, los cuales fueron trasladados en un camión de la empresa Fort Knox, propiedad de Jonathan Chévez.
Según los testimonios fue Luisa de Pérez, nuera del exmandatario, quien giró instrucciones de cómo se debía emitir una de las facturas de dichas compras. Monzón dijo que la exvicemandataria pedía que el dinero producto de los sobornos fuera entregado en la Casa Presidencial, “fue en el Callejón Manchén donde ingresaba el dinero para resguardarlo en la Vicepresidencia” dijo, por ser intermediario él recibió una US$ 260 mil
Entre la repartición del dinero también figuraba el exinterventor de la Porturia Quetzal, Allan Marroquín y a quien Baldetti intentó sacar del grupo que recibía dinero del negocio anómalo, lo que creó roces dentro de la organización criminal.