Claudia Méndez Ascencio, exintendente de Aduanas, negó este viernes su vinculación con la estructura criminal de defraudación aduanera La Línea en una maratónica declaración que duro más de ocho horas, ante el Juez de Mayor Riesgo B Miguel Ángel Gálvez, quien aplazó la audiencia para este lunes a las nueve horas. La acusado quedó recluida en la carceleta del Organismo Judicial donde un médico del INACIF la visitará para constatar su estado de salud.
En su larga declaración la exintendente argumentó que ella no autorizó los cambios de personal que favorecieron a la estructura criminal. “En ningún momento la rotación de personal fue consentido por mi persona cuando fui intendente, porque no estoy administrando de forma directa allí”, dijo.
Méndez dijo con la voz quebrada que ella había proporcionado apoyo a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y al Ministerio Público (MP) en la investigación que logró la desarticulación de la estructura criminal referida.
Reveló que cuando asumió como Intendente en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) denunció haber encontrado varias anomalías. Asimismo aseguró que la CICIG sabía gracias a ella del cambio de la persona que ha sido identificada como “W”, en referencia a William Morales quien era parte de La Línea.
Durante su declaración Méndez Asencio expresó temor porque su vida podría correr peligro debido a su intervención, asegurando que los indicios presentados ayer jueves por el MP solo demuestran su inocencia. “Ya no está en juego mi libertad, es mi vida y la de mi familia la que está en juego”, expresó, visiblemente afectada.
Posteriormente a un receso otorgado por el juez Gálvez, la exfuncionaria expuso una denuncia que recibió por correo electrónico de parte unos tramitadores, acerca de abusos contra empleados de la aduana de Puerto Quetzal, que contiene inclusive una amenaza de muerte. La denuncia destaca relación de Mynor Martínez, gerente de la aduana, con Francisco Javier Ortíz, alias Teniente Jeréz, uno de los integrantes de La Línea.
Méndez insistió en su inocencia y renuncio al derecho de secreto bancario, entregando al juez sus estados de cuenta y otros documentos de transacciones monetarias y de ahorros, así como también sus declaraciones patrimoniales desde el 2013. Además indicó que está dispuesta a someterse a una prueba de polígrafo para comprobar su inocencia.
“Claudia” podría ser la hija del Teniente Jeréz
Posteriormente al receso otorgado para el almuerzo, Méndez continuó con su declaración en que describió cómo fue nombrada intendente de Adunas, indicando que fue con una llamada desde la Casa Presidencial de Juan Carlos Monzón Rojas, entonces secretario privado de la vicepresidenta Roxana Baldett.
Esta declaración implicaría que Baldetti y Monzón tenían influencia en el nombramiento de personas en la SAT, entidad autónoma y sin relación con el Organismo Ejecutivo.
La exfuncionaria argumentó que “una tal Claudia Méndez” que aparece en una escucha telefónica no significa que sea ella. Además, expresó que la “Claudia” que aparece en escuchas telefónicas, podría ser la hija del teniente Jeréz.
Méndez declaró que su relación con Estuardo González alias “Eco” se suscribía, por instrucciones del Superinendente Carlos Muñoz, para el manejo de los medios de comunicación y levantar el perfil de la entidad recaudadora. “No vengo aquí a negar la relación con el señor Estuardo, pero estoy explicando el contexto de la situación”, dijo.
La acusación del MP
Méndez Asencio es señalada de los delitos de caso especial de defraudación aduanera, cohecho pasivo y asociación ilícita, los mismos por los que están en prisión preventiva Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti.
Ayer jueves el Ministerio Público acusó a la exintendente de recibir un 5 por ciento de sobornos de la estructura criminal denominada La Línea. Según esto, Méndez colaboría con la estructura criminal dedicada defraudación aduanera con colocar a personal en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) y en las aduanas, según el ente investigador.
Según el MP, la exintendente facilitó el paso de 1,561 contenedores en su calidad de intendete de Aduanas, las imputaciones se hacen con ayuda de varias escuchas telefónicas que sustentan la imputación de los hechos contra Méndez.
Claudia Méndez Ascencio, exintendente de Aduanas, negó este viernes su vinculación con la estructura criminal de defraudación aduanera La Línea en una maratónica declaración que duro más de ocho horas, ante el Juez de Mayor Riesgo B Miguel Ángel Gálvez, quien aplazó la audiencia para este lunes a las nueve horas. La acusado quedó recluida en la carceleta del Organismo Judicial donde un médico del INACIF la visitará para constatar su estado de salud.
En su larga declaración la exintendente argumentó que ella no autorizó los cambios de personal que favorecieron a la estructura criminal. “En ningún momento la rotación de personal fue consentido por mi persona cuando fui intendente, porque no estoy administrando de forma directa allí”, dijo.
Méndez dijo con la voz quebrada que ella había proporcionado apoyo a la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) y al Ministerio Público (MP) en la investigación que logró la desarticulación de la estructura criminal referida.
Reveló que cuando asumió como Intendente en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) denunció haber encontrado varias anomalías. Asimismo aseguró que la CICIG sabía gracias a ella del cambio de la persona que ha sido identificada como “W”, en referencia a William Morales quien era parte de La Línea.
Durante su declaración Méndez Asencio expresó temor porque su vida podría correr peligro debido a su intervención, asegurando que los indicios presentados ayer jueves por el MP solo demuestran su inocencia. “Ya no está en juego mi libertad, es mi vida y la de mi familia la que está en juego”, expresó, visiblemente afectada.
Posteriormente a un receso otorgado por el juez Gálvez, la exfuncionaria expuso una denuncia que recibió por correo electrónico de parte unos tramitadores, acerca de abusos contra empleados de la aduana de Puerto Quetzal, que contiene inclusive una amenaza de muerte. La denuncia destaca relación de Mynor Martínez, gerente de la aduana, con Francisco Javier Ortíz, alias Teniente Jeréz, uno de los integrantes de La Línea.
Méndez insistió en su inocencia y renuncio al derecho de secreto bancario, entregando al juez sus estados de cuenta y otros documentos de transacciones monetarias y de ahorros, así como también sus declaraciones patrimoniales desde el 2013. Además indicó que está dispuesta a someterse a una prueba de polígrafo para comprobar su inocencia.
“Claudia” podría ser la hija del Teniente Jeréz
Posteriormente al receso otorgado para el almuerzo, Méndez continuó con su declaración en que describió cómo fue nombrada intendente de Adunas, indicando que fue con una llamada desde la Casa Presidencial de Juan Carlos Monzón Rojas, entonces secretario privado de la vicepresidenta Roxana Baldett.
Esta declaración implicaría que Baldetti y Monzón tenían influencia en el nombramiento de personas en la SAT, entidad autónoma y sin relación con el Organismo Ejecutivo.
La exfuncionaria argumentó que “una tal Claudia Méndez” que aparece en una escucha telefónica no significa que sea ella. Además, expresó que la “Claudia” que aparece en escuchas telefónicas, podría ser la hija del teniente Jeréz.
Méndez declaró que su relación con Estuardo González alias “Eco” se suscribía, por instrucciones del Superinendente Carlos Muñoz, para el manejo de los medios de comunicación y levantar el perfil de la entidad recaudadora. “No vengo aquí a negar la relación con el señor Estuardo, pero estoy explicando el contexto de la situación”, dijo.
La acusación del MP
Méndez Asencio es señalada de los delitos de caso especial de defraudación aduanera, cohecho pasivo y asociación ilícita, los mismos por los que están en prisión preventiva Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti.
Ayer jueves el Ministerio Público acusó a la exintendente de recibir un 5 por ciento de sobornos de la estructura criminal denominada La Línea. Según esto, Méndez colaboría con la estructura criminal dedicada defraudación aduanera con colocar a personal en la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) y en las aduanas, según el ente investigador.
Según el MP, la exintendente facilitó el paso de 1,561 contenedores en su calidad de intendete de Aduanas, las imputaciones se hacen con ayuda de varias escuchas telefónicas que sustentan la imputación de los hechos contra Méndez.