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Demagogias centroamericanas

.
Marcos Jacobo Suárez Sipmann
14 de marzo, 2025

El populismo ha sido estudiado desde distintos prismas. Sin embargo, la aproximación desde una óptica centroamericana era limitada. María Esperanza Casullo y Harry Brown Araúz han colmado esta laguna coordinando el libro El populismo en América Central. La pieza que falta para comprender un fenómeno global.  

Nueve escritores analizan cómo el populismo se ha presentado en Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala. Suman las experiencias de los países caribeños, República Dominicana y Cuba, que contribuyen a una mejor comprensión y profundización.  

Los autores entienden que el populismo es un concepto que carece de una definición normativa. Una forma política con planteamientos de derecha o de izquierda, según conveniencias electorales; no pertenece propiamente a ninguna corriente ideológica. En EE. UU. y Europa, el populismo en la mayoría de los casos se basa en la pureza del pueblo (en peligro de ser contaminado por la “otredad”). En cambio, en Centroamérica – y Latinoamérica en general – se construye la entidad moral precisamente a partir de la “impureza”. Así, los autores presentan cinco criterios existentes. Como desvío de la teoría de la modernización; como ideología delgada; como tipo de organización política; como tipo discursivo para movilizar a los electores; y por último, como performance pública de las diferencias socioculturales.  

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Con todo, el desafío teórico principal es desarrollar una noción amplia que permita incluir todos los elementos manteniendo un núcleo común fijo. Ajustándose a las dinámicas propias del área, los analistas parten de la teoría de la modernización para comprender el populismo histórico en el istmo. Ello, sin olvidar en momento alguno el importante papel desempeñado por discurso, lenguaje, enemigos externos e internos… en el mito.  

Se recuerda al lector que esta narrativa se ha materializado en cuatro direcciones. Hacia arriba, situando a los culpables en la elite política o económica; hacia abajo, responsabilizando a los migrantes del sufrimiento del pueblo; hacia el futuro, cuando el líder promete un mejor porvenir una vez saque a los malos del poder; y hacia el pasado, cuando el iluminado anuncia que logrará el retorno a un pasado quimérico caracterizado por condiciones económicas y sociales generadoras de estabilidad para la sociedad.   

Mas no es objeto de la obra buscar una definición definitiva. Ni defender un determinado enfoque teórico. Lo que se pretende es identificar puntos de partida en el estudio.  

América Central fue el laboratorio para lo que ocurriría en el Cono Sur años después. El centroamericano comparte con el latinoamericano una serie de condiciones que facilitan el surgimiento del populismo, a saber: un marco político y económico caracterizado por altos grados de desigualdad, demandas democráticas insatisfechas, derrumbre de partidos tradicionales, acentuada personalización de la política y una injerencia de una potencia cercana considerada como enemiga.  

No obstante, el estudio muestra que el centroamericano ha sido menos radical que el resto de latinoamericanos. La razón es que, a diferencia de figuras como Juan Domingo Perón, los populistas centroamericanos han carecido de una capacidad transformadora en los asuntos económicos y sociales.  

El populismo centroamericano ha sido motivado por tres factores primordiales:  

Primero, la ausencia de un proyecto económico modernizador. En Guatemala, Honduras, El Salvador y República Dominicana no se desarrolló la industrialización. Por tanto, no hubo tampoco una clase obrera sólida en la que el populismo pudiera sostenerse.   

También, una recurrente violencia política materializada en diversos golpes de Estado, en no pocas ocasiones orquestados, apoyados o con anuencia de las élites políticas y económicas. Muy grave, además, el papel – complejo y ambiguo – jugado por EE. UU. mediante su participación directa o indirecta en estos sucesos.  

Por último, un alto grado de dependencia de Washington. Esta debilidad se combina con el hecho de que no todos los países comparten el mismo antagonista foráneo. En Panamá, EE. UU. fue un adversario constante por la apropiación del Canal; pero en República Dominicana, lo ha sido Haití por los niveles de migrantes y su inestabilidad política.  

El libro cierra con algunas cuestiones para investigaciones futuras: destaca la función que juegan las redes sociales como conducto predilecto para construir relaciones comunicativas directas y asimétricas con el líder; la relación histórica entre EE. UU. y las elites políticas centroamericanas, y el reconsiderar el populismo latinoamericano teniendo en cuenta las experiencias en el istmo debido a las similitudes existentes. 

Al estudio del populismo se le ha prestado una insuficiente atención académica. Sobre todo, teniendo en cuenta sus nefastos efectos pasados y presentes en nuestra región. En este contexto, cabe decir que la obra reseñada es exhaustiva, amén de necesaria. Una lectura capital para todo aquel interesado en la historia política centroamericana.  

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Demagogias centroamericanas

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Marcos Jacobo Suárez Sipmann
14 de marzo, 2025

El populismo ha sido estudiado desde distintos prismas. Sin embargo, la aproximación desde una óptica centroamericana era limitada. María Esperanza Casullo y Harry Brown Araúz han colmado esta laguna coordinando el libro El populismo en América Central. La pieza que falta para comprender un fenómeno global.  

Nueve escritores analizan cómo el populismo se ha presentado en Panamá, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala. Suman las experiencias de los países caribeños, República Dominicana y Cuba, que contribuyen a una mejor comprensión y profundización.  

Los autores entienden que el populismo es un concepto que carece de una definición normativa. Una forma política con planteamientos de derecha o de izquierda, según conveniencias electorales; no pertenece propiamente a ninguna corriente ideológica. En EE. UU. y Europa, el populismo en la mayoría de los casos se basa en la pureza del pueblo (en peligro de ser contaminado por la “otredad”). En cambio, en Centroamérica – y Latinoamérica en general – se construye la entidad moral precisamente a partir de la “impureza”. Así, los autores presentan cinco criterios existentes. Como desvío de la teoría de la modernización; como ideología delgada; como tipo de organización política; como tipo discursivo para movilizar a los electores; y por último, como performance pública de las diferencias socioculturales.  

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Con todo, el desafío teórico principal es desarrollar una noción amplia que permita incluir todos los elementos manteniendo un núcleo común fijo. Ajustándose a las dinámicas propias del área, los analistas parten de la teoría de la modernización para comprender el populismo histórico en el istmo. Ello, sin olvidar en momento alguno el importante papel desempeñado por discurso, lenguaje, enemigos externos e internos… en el mito.  

Se recuerda al lector que esta narrativa se ha materializado en cuatro direcciones. Hacia arriba, situando a los culpables en la elite política o económica; hacia abajo, responsabilizando a los migrantes del sufrimiento del pueblo; hacia el futuro, cuando el líder promete un mejor porvenir una vez saque a los malos del poder; y hacia el pasado, cuando el iluminado anuncia que logrará el retorno a un pasado quimérico caracterizado por condiciones económicas y sociales generadoras de estabilidad para la sociedad.   

Mas no es objeto de la obra buscar una definición definitiva. Ni defender un determinado enfoque teórico. Lo que se pretende es identificar puntos de partida en el estudio.  

América Central fue el laboratorio para lo que ocurriría en el Cono Sur años después. El centroamericano comparte con el latinoamericano una serie de condiciones que facilitan el surgimiento del populismo, a saber: un marco político y económico caracterizado por altos grados de desigualdad, demandas democráticas insatisfechas, derrumbre de partidos tradicionales, acentuada personalización de la política y una injerencia de una potencia cercana considerada como enemiga.  

No obstante, el estudio muestra que el centroamericano ha sido menos radical que el resto de latinoamericanos. La razón es que, a diferencia de figuras como Juan Domingo Perón, los populistas centroamericanos han carecido de una capacidad transformadora en los asuntos económicos y sociales.  

El populismo centroamericano ha sido motivado por tres factores primordiales:  

Primero, la ausencia de un proyecto económico modernizador. En Guatemala, Honduras, El Salvador y República Dominicana no se desarrolló la industrialización. Por tanto, no hubo tampoco una clase obrera sólida en la que el populismo pudiera sostenerse.   

También, una recurrente violencia política materializada en diversos golpes de Estado, en no pocas ocasiones orquestados, apoyados o con anuencia de las élites políticas y económicas. Muy grave, además, el papel – complejo y ambiguo – jugado por EE. UU. mediante su participación directa o indirecta en estos sucesos.  

Por último, un alto grado de dependencia de Washington. Esta debilidad se combina con el hecho de que no todos los países comparten el mismo antagonista foráneo. En Panamá, EE. UU. fue un adversario constante por la apropiación del Canal; pero en República Dominicana, lo ha sido Haití por los niveles de migrantes y su inestabilidad política.  

El libro cierra con algunas cuestiones para investigaciones futuras: destaca la función que juegan las redes sociales como conducto predilecto para construir relaciones comunicativas directas y asimétricas con el líder; la relación histórica entre EE. UU. y las elites políticas centroamericanas, y el reconsiderar el populismo latinoamericano teniendo en cuenta las experiencias en el istmo debido a las similitudes existentes. 

Al estudio del populismo se le ha prestado una insuficiente atención académica. Sobre todo, teniendo en cuenta sus nefastos efectos pasados y presentes en nuestra región. En este contexto, cabe decir que la obra reseñada es exhaustiva, amén de necesaria. Una lectura capital para todo aquel interesado en la historia política centroamericana.  

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