Crisis penitenciaria: un sistema atrapado entre la corrupción, el control criminal y la rotación de autoridades
Históricamente, el Sistema Penitenciario (SP) ha enfrentado una crisis profunda. Esto se debe a una serie de problemas estructurales. También a la falta de compromiso en la seguridad de los internos y del personal.
En perspectiva. La realidad es que no se quiere entender los conflictos. Existe la percepción de que no existe voluntad por parte del Gobierno para cambiar la situación. Un ejemplo de ello es que no se ha querido invertir decididamente.
- En Guatemala se necesitan de nuevas cárceles de máxima seguridad. Una de las tantas promesas sin cumplir del presidente Bernardo Arévalo. Antes de ser juramentado, alardeaba de que les quitaría el control a las estructuras criminales mediante la construcción de prisiones.
- Sin embargo, las cárceles siguen en manos de los privados de libertad. Muchos de los delitos que afectan a los ciudadanos en las calles, se originan en las prisiones. Por otro lado, está la corrupción. Un problema endémico, que ha ido en aumento.
- Los cambios de autoridades agravan el asunto. Durante la presente administración ya se han suscitado dos. A inicios de abril, Sergio Vela fue destituido del cargo de director del SP. El Ministerio de Gobernación (MINGOB) no dio a conocer detalles y, en redes sociales, trascendió que estaba involucrado en actos de corrupción.
- En su lugar fue nombrado Luis Juárez. Pero, a semanas asumir, dimitió. Esto demuestra la importancia que tiene, que el titular del MINGOB elija al equipo correcto. Alguien que perdure en el tiempo y que desempeñe bien un cargo como el de Director del SP.
Voces. Según el exfuncionario Julio Clavería, la corrupción es un mal que se debe atacar. Para ello, se necesita de una coordinación interinstitucional. La idea de construir nuevas cárceles no debe pasar desapercibida. El país necesita al menos unas tres más con la capacidad de albergar al menos unos 4000 internos.
- Dijo también que “es necesario reformar cárceles como Pavón, Canadá y Cantel, tal y como ya se hizo con El Infiernito, ahora conocida como Renovación I”. Desde su experiencia, estas nuevas prisiones deberían estar en lugares como Guastatoya, El Progreso; Huehuetenango e incluso San Marcos.
- “Lo importante es aislar y separar a los reos de alta peligrosidad”, comentó Clavería. Agregó que también es necesario que el Ministerio Público (MP) investigue las órdenes de traslado emitidas por los jueces.
- Un caso en concreto es el de Eduardo Masaya, quien fue llevado de Mariscal Zavala al Preventivo de zona 18. El abogado fue ligado a proceso por el delito de falsedad ideológica en el contexto del caso "Corrupción Semilla”.
En conclusión. Sin duda, mientras no exista voluntad política para transformar el SP con infraestructura adecuada, liderazgo competente y un enfoque integral de seguridad y rehabilitación, las cárceles seguirán siendo focos de criminalidad.
Crisis penitenciaria: un sistema atrapado entre la corrupción, el control criminal y la rotación de autoridades
Históricamente, el Sistema Penitenciario (SP) ha enfrentado una crisis profunda. Esto se debe a una serie de problemas estructurales. También a la falta de compromiso en la seguridad de los internos y del personal.
En perspectiva. La realidad es que no se quiere entender los conflictos. Existe la percepción de que no existe voluntad por parte del Gobierno para cambiar la situación. Un ejemplo de ello es que no se ha querido invertir decididamente.
- En Guatemala se necesitan de nuevas cárceles de máxima seguridad. Una de las tantas promesas sin cumplir del presidente Bernardo Arévalo. Antes de ser juramentado, alardeaba de que les quitaría el control a las estructuras criminales mediante la construcción de prisiones.
- Sin embargo, las cárceles siguen en manos de los privados de libertad. Muchos de los delitos que afectan a los ciudadanos en las calles, se originan en las prisiones. Por otro lado, está la corrupción. Un problema endémico, que ha ido en aumento.
- Los cambios de autoridades agravan el asunto. Durante la presente administración ya se han suscitado dos. A inicios de abril, Sergio Vela fue destituido del cargo de director del SP. El Ministerio de Gobernación (MINGOB) no dio a conocer detalles y, en redes sociales, trascendió que estaba involucrado en actos de corrupción.
- En su lugar fue nombrado Luis Juárez. Pero, a semanas asumir, dimitió. Esto demuestra la importancia que tiene, que el titular del MINGOB elija al equipo correcto. Alguien que perdure en el tiempo y que desempeñe bien un cargo como el de Director del SP.
Voces. Según el exfuncionario Julio Clavería, la corrupción es un mal que se debe atacar. Para ello, se necesita de una coordinación interinstitucional. La idea de construir nuevas cárceles no debe pasar desapercibida. El país necesita al menos unas tres más con la capacidad de albergar al menos unos 4000 internos.
- Dijo también que “es necesario reformar cárceles como Pavón, Canadá y Cantel, tal y como ya se hizo con El Infiernito, ahora conocida como Renovación I”. Desde su experiencia, estas nuevas prisiones deberían estar en lugares como Guastatoya, El Progreso; Huehuetenango e incluso San Marcos.
- “Lo importante es aislar y separar a los reos de alta peligrosidad”, comentó Clavería. Agregó que también es necesario que el Ministerio Público (MP) investigue las órdenes de traslado emitidas por los jueces.
- Un caso en concreto es el de Eduardo Masaya, quien fue llevado de Mariscal Zavala al Preventivo de zona 18. El abogado fue ligado a proceso por el delito de falsedad ideológica en el contexto del caso "Corrupción Semilla”.
En conclusión. Sin duda, mientras no exista voluntad política para transformar el SP con infraestructura adecuada, liderazgo competente y un enfoque integral de seguridad y rehabilitación, las cárceles seguirán siendo focos de criminalidad.