El expresidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, fue imputado por otro caso de corrupción, esta vez es señalado de recibir sobornos de la constructora Odebrecht.
Lula, quien recién fue beneficiado con un régimen que le permitiría salir de la cárcel durante el día y volver por las noche, recibe esta nueva acusación que se suma a otros procesos legales en su contra, según medios de comunicación de Brasil.
La imputación contra Lula señala que negoció con la constructora Odebrecht para recibir unos 15 millones de euros (Q150 millones) destinados al Partido de los Trabajadores, la organización que lo apoya.
A cambio, Lula promovería ampliar el monto de un préstamos millonario para Angola por medio del estatal Banco Nacional del Desarrollo Económico y Social (BNDES).
Odebrecht, que ejecutaba obras en Angola cobró por los trabajos, sacó provecho de la ampliación de los préstamos, indican los medios de comunicación.
Preso en una comisaría
Lula se encuentra encarcelado desde el 7 de abril de 2018 en una comisaría de Curitiba, al sur de Brail.
Fue sentenciado a ocho años y diez meses de prisión por los delitos de corrupción pasiva y blanqueo de dinero por el caso OAS.
El expresidente recibió un apartamento como pago de sobornos relacionados con contratos de la constructora OAS y la estatal Petrobras.
El exmandatario, quien mantiene su deseo de volver a postularse a la presidencia de su país, ha manifestado que las acusaciones en su contra solo buscan terminar con su carrera política.
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La imputación contra Lula señala que negoció con la constructora Odebrecht para recibir unos 15 millones de euros (Q150 millones) destinados al Partido de los Trabajadores, la organización que lo apoya.
A cambio, Lula promovería ampliar el monto de un préstamos millonario para Angola por medio del estatal Banco Nacional del Desarrollo Económico y Social (BNDES).
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