EL TIPO DE CAMBIO DE HOY ES DE: El mercado inmobiliario de EE, UU. comienza a enfriarse. Tras años de aumentos sostenidos, los precios de las viviendas caerán levemente hacia finales de 2025. El aumento en la oferta y una demanda más cautelosa están reconfigurando las dinámicas de compra y venta.
Por qué importa. El cambio de tendencia rompe con más de una década de alzas continuas. Aunque la caída prevista es moderada, marca un giro estructural en el acceso a la vivienda y la estrategia de inversión residencial.
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Redfin anticipa una baja del 1 % interanual en los precios durante el cuarto trimestre de 2025, tras una estabilización en el tercero.
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Es el primer descenso significativo desde 2023, cuando el mercado tuvo un breve respiro en medio de alzas históricas de tasas.
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“Ya hay espacio para negociar”, afirmó Chen Zhao, jefa de investigación económica de Redfin, quien sugiere aprovechar la ventana actual.
En el radar. La baja responde a un desbalance claro: más casas disponibles, menos compradores dispuestos. La presión ya se refleja en los tiempos de venta y en los incentivos ofrecidos por los propietarios.
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Las ventas de viviendas existentes cayeron 1.1 % interanual en abril, alcanzando su nivel más bajo en seis meses. Hoy, una casa tarda 40 días en venderse, cinco más que en 2024.
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El inventario total aumentó 16.7 % y las nuevas publicaciones crecieron 8.6 %, lo que incrementa la competencia entre vendedores.
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Casi la mitad ya ofrece concesiones: ayudan con costos de cierre o aceptan cubrir reparaciones con tal de cerrar la venta.
Punto de fricción. Las tasas hipotecarias altas siguen siendo el principal obstáculo. A esto se suma la incertidumbre económica, los aranceles y el déficit fiscal, que limitan la capacidad de compra pese a mejoras salariales.
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Desde 2022, las tasas hipotecarias han subido abruptamente. Para finales de 2025, se mantendrán cercanas al 6.8 %, dificultando el acceso al crédito.
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Muchos propietarios que compraron en 2021 o 2022 siguen intentando vender a precios altos, pero terminan bajando sus expectativas tras semanas sin ofertas.
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“Al final ceden”, aseguró Corey Stambaugh, agente de Redfin en Carolina del Norte. Las propiedades más antiguas en el mercado son el blanco ideal para negociar.
Ahora qué. Las caídas no serán uniformes. Algunas zonas podrían ver descensos mayores, mientras otras mantendrán precios firmes. Para los compradores. Se abre un período clave para evaluar opciones y actuar con estrategia.
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Se espera que las áreas con menor demanda —como zonas del sur y oeste— concentren las mayores reducciones. En contraste, el Medio Oeste y el Noreste podrían resistir con precios estables o al alza.
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Redfin recomienda enfocarse en viviendas que lleven varias semanas listadas: allí hay más margen para hacer ofertas por debajo del precio.
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Aunque el ajuste será limitado, el alza estimada del 4 % en los salarios podría mejorar ligeramente la asequibilidad y abrir oportunidades para quienes compren con visión de largo plazo.
Con información de: Real Estate Market & Lifestyle
El mercado inmobiliario de EE, UU. comienza a enfriarse. Tras años de aumentos sostenidos, los precios de las viviendas caerán levemente hacia finales de 2025. El aumento en la oferta y una demanda más cautelosa están reconfigurando las dinámicas de compra y venta.
Por qué importa. El cambio de tendencia rompe con más de una década de alzas continuas. Aunque la caída prevista es moderada, marca un giro estructural en el acceso a la vivienda y la estrategia de inversión residencial.
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Redfin anticipa una baja del 1 % interanual en los precios durante el cuarto trimestre de 2025, tras una estabilización en el tercero.
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Es el primer descenso significativo desde 2023, cuando el mercado tuvo un breve respiro en medio de alzas históricas de tasas.
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“Ya hay espacio para negociar”, afirmó Chen Zhao, jefa de investigación económica de Redfin, quien sugiere aprovechar la ventana actual.
En el radar. La baja responde a un desbalance claro: más casas disponibles, menos compradores dispuestos. La presión ya se refleja en los tiempos de venta y en los incentivos ofrecidos por los propietarios.
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Las ventas de viviendas existentes cayeron 1.1 % interanual en abril, alcanzando su nivel más bajo en seis meses. Hoy, una casa tarda 40 días en venderse, cinco más que en 2024.
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El inventario total aumentó 16.7 % y las nuevas publicaciones crecieron 8.6 %, lo que incrementa la competencia entre vendedores.
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Casi la mitad ya ofrece concesiones: ayudan con costos de cierre o aceptan cubrir reparaciones con tal de cerrar la venta.
Punto de fricción. Las tasas hipotecarias altas siguen siendo el principal obstáculo. A esto se suma la incertidumbre económica, los aranceles y el déficit fiscal, que limitan la capacidad de compra pese a mejoras salariales.
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Desde 2022, las tasas hipotecarias han subido abruptamente. Para finales de 2025, se mantendrán cercanas al 6.8 %, dificultando el acceso al crédito.
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Muchos propietarios que compraron en 2021 o 2022 siguen intentando vender a precios altos, pero terminan bajando sus expectativas tras semanas sin ofertas.
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“Al final ceden”, aseguró Corey Stambaugh, agente de Redfin en Carolina del Norte. Las propiedades más antiguas en el mercado son el blanco ideal para negociar.
Ahora qué. Las caídas no serán uniformes. Algunas zonas podrían ver descensos mayores, mientras otras mantendrán precios firmes. Para los compradores. Se abre un período clave para evaluar opciones y actuar con estrategia.
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Se espera que las áreas con menor demanda —como zonas del sur y oeste— concentren las mayores reducciones. En contraste, el Medio Oeste y el Noreste podrían resistir con precios estables o al alza.
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Redfin recomienda enfocarse en viviendas que lleven varias semanas listadas: allí hay más margen para hacer ofertas por debajo del precio.
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Aunque el ajuste será limitado, el alza estimada del 4 % en los salarios podría mejorar ligeramente la asequibilidad y abrir oportunidades para quienes compren con visión de largo plazo.
Con información de: Real Estate Market & Lifestyle
