El arzobispo Gonzalo de Villa, durante el Te Deum celebrado en la Catedral Metropolitana por el 199 aniversario de la Independencia de Guatemala, instó a perdonar, dar misericordia e igualdad de oportunidades para lograr el bien común, lo cual es responsabilidad de todos.
Al acto litúrgico asistió el presidente Alejandro Giammattei y el vicepresidente Guillermo Castillo, quienes entonaron el himno nacional junto con un reducido número de funcionarios del gabinete. También participó el alcalde metropolitano, Ricardo Quiñónez.
Monseñor dice que la gente le da sentido a Guatemala
Durante la solemne liturgia, De Villa hizo varias peticiones, entre ellas, que en este aniversario “Guatemala sea la madre justa y amorosa para todos sus hijos”. A la vez pidió ayuda divina para que toda la población sea sensible a las necesidades de los demás y a respetar su dignidad.
“Esto no solo es un tema de Estado. Nos concierne a católicos y evangélicos, ricos y pobres, indígenas y ladinos, hombres y mujeres”.
Gonzalo de Villa, arzobispo metropolitano.
Monseñor además agradeció por la tierra de bendición que es Guatemala al tener lagos, paisajes, territorios de maíz, de muchos árboles, colores y tradiciones. Sin embargo, aclaró que sin su gente, sólo sería un territorio vacío. “La población es lo que le da sentido”, afirmó.
En estas festividades patrias, llamó también a pedir por la gente maltratada, golpeada y por quienes nacieron en rincones sin acceso a los servicios elementales. También por los atropellados en su dignidad y derecho a la vida, los que no tiene acceso a la justicia y niños desnutridos.
“Es necesario perdonar siempre porque no todo se resuelve con la justicia… sufrimientos, divisones y guerras podrían evitarse con el perdón”, puntualizó.
El arzobispo Gonzalo de Villa, durante el Te Deum celebrado en la Catedral Metropolitana por el 199 aniversario de la Independencia de Guatemala, instó a perdonar, dar misericordia e igualdad de oportunidades para lograr el bien común, lo cual es responsabilidad de todos.
Al acto litúrgico asistió el presidente Alejandro Giammattei y el vicepresidente Guillermo Castillo, quienes entonaron el himno nacional junto con un reducido número de funcionarios del gabinete. También participó el alcalde metropolitano, Ricardo Quiñónez.
Monseñor dice que la gente le da sentido a Guatemala
Durante la solemne liturgia, De Villa hizo varias peticiones, entre ellas, que en este aniversario “Guatemala sea la madre justa y amorosa para todos sus hijos”. A la vez pidió ayuda divina para que toda la población sea sensible a las necesidades de los demás y a respetar su dignidad.
“Esto no solo es un tema de Estado. Nos concierne a católicos y evangélicos, ricos y pobres, indígenas y ladinos, hombres y mujeres”.
Gonzalo de Villa, arzobispo metropolitano.
Monseñor además agradeció por la tierra de bendición que es Guatemala al tener lagos, paisajes, territorios de maíz, de muchos árboles, colores y tradiciones. Sin embargo, aclaró que sin su gente, sólo sería un territorio vacío. “La población es lo que le da sentido”, afirmó.
En estas festividades patrias, llamó también a pedir por la gente maltratada, golpeada y por quienes nacieron en rincones sin acceso a los servicios elementales. También por los atropellados en su dignidad y derecho a la vida, los que no tiene acceso a la justicia y niños desnutridos.
“Es necesario perdonar siempre porque no todo se resuelve con la justicia… sufrimientos, divisones y guerras podrían evitarse con el perdón”, puntualizó.