El robo de electricidad en Malacatán, San Marcos, afecta servicios esenciales y pone en riesgo la salud y seguridad de los pobladores.
En ese municipio el 75% de los usuarios no paga y cuando se le corta el suministro, se reconecta de forma ilegal, según Energuate.
Lo más grave de todo es que la propia Municipalidad incurre en este delito y su deuda ya suma Q35 millones.
El monto corresponde al servicio de alumbrado público y al consumo por otros servicios atendidos por la comuna.
El origen del problema
El robo de energía eléctrica en Malacatán lleva varios años. Estas acciones ilegales fueron iniciadas por las organizaciones Frente Nacional de Lucha y Asosidesma.
Los dirigentes promovieron las reconexiones ilegales que pronto se convirtió en una práctica común, también adoptada por el Comité de Desarrollo Campesino (Codeca).
Este lunes las autoridades municipales y de Energuate se reunieron para intentar solucionar el problema, pero no hubo acuerdos.
Este martes continuarán dialogango. La Municipalidad pide la reconexión de inmediato, pero Energuate demanda un convenio de pago.
Además, la empresa pide que las comunidades no se opongan a los trabajos de mantenimiento.
Asimismo, que se garantice la integridad física de sus trabajadores que en repetidas ocasiones han sido retenidos.
El robo de electricidad en Malacatán, San Marcos, afecta servicios esenciales y pone en riesgo la salud y seguridad de los pobladores.
En ese municipio el 75% de los usuarios no paga y cuando se le corta el suministro, se reconecta de forma ilegal, según Energuate.
Lo más grave de todo es que la propia Municipalidad incurre en este delito y su deuda ya suma Q35 millones.
El monto corresponde al servicio de alumbrado público y al consumo por otros servicios atendidos por la comuna.
El origen del problema
El robo de energía eléctrica en Malacatán lleva varios años. Estas acciones ilegales fueron iniciadas por las organizaciones Frente Nacional de Lucha y Asosidesma.
Los dirigentes promovieron las reconexiones ilegales que pronto se convirtió en una práctica común, también adoptada por el Comité de Desarrollo Campesino (Codeca).
Este lunes las autoridades municipales y de Energuate se reunieron para intentar solucionar el problema, pero no hubo acuerdos.
Este martes continuarán dialogango. La Municipalidad pide la reconexión de inmediato, pero Energuate demanda un convenio de pago.
Además, la empresa pide que las comunidades no se opongan a los trabajos de mantenimiento.
Asimismo, que se garantice la integridad física de sus trabajadores que en repetidas ocasiones han sido retenidos.