La poeta Delia Quiñónez fue reonocida con el Premio Nacional de Literatura 2016, informó este viernes el ministro de Cultura y Deportes, José Luis Chea Urruela.
La escritora, nacida en 1946 en la ciudad de Guatemala, tiene un amplio recorrido en las letras nacionales y su trabajo es reconocido dentro y fuera de las fronteras patrias.
Es maestra de Educación Primaria, Profesora de Enseñanza Media y Licenciada en Letras. Miembro de Número de la Academia Guatemalteca de la Lengua, Correspondiente de la Real Española.
En 1999 le fue dedicada la Feria Municipal de la Ciudad de Guatemala. Condecorada con la Orden “Vicenta Laparra de la Cerda” en 2004. Perteneció al Grupo de Poetas “Nuevo Signo”. Miembro fundador del Premio Guatemalteco de Novela y de la Fundación Guatemalteca para las Letras.
Es autora de poesía: Barro Pleno, Otros Poemas, Nos habita el paraíso, Ultramar, Vuelo de piedra, puño y flor. Relatos breves: Astroloquía (en coautoría con Marcela Valdeavellano y Julia Abbott; ensayos y comentarios sobre temas de literatura, arte y feminismo. Su obra aparece en más de 30 antologías guatemaltecas y de otros países.
Uno de los poemas de Quiñónez.
Otra vez el amor (1)
Todo lo dulce y amargo
brotó de un solo instante:
tiempo espacio
sacrificados
al día que llegaba entre cenizas.
Visión, su luz, para vivir.
Cerrazón, su luz, para no saber vivir
sino atada a las manos
que escribieron la primera
y la última palabra.
Abarqué en la penumbra
todas las primaveras,
los soles,
los diminutos puntos de fuego
de todas las esquinas
y los puertos;
de todas las hogueras
que llamean
en la sombra que me cubre.
¡Todo el mar no bastó
para dejar sin huella
el breve trigo que dejó tu beso!
La poeta Delia Quiñónez fue reonocida con el Premio Nacional de Literatura 2016, informó este viernes el ministro de Cultura y Deportes, José Luis Chea Urruela.
La escritora, nacida en 1946 en la ciudad de Guatemala, tiene un amplio recorrido en las letras nacionales y su trabajo es reconocido dentro y fuera de las fronteras patrias.
Es maestra de Educación Primaria, Profesora de Enseñanza Media y Licenciada en Letras. Miembro de Número de la Academia Guatemalteca de la Lengua, Correspondiente de la Real Española.
En 1999 le fue dedicada la Feria Municipal de la Ciudad de Guatemala. Condecorada con la Orden “Vicenta Laparra de la Cerda” en 2004. Perteneció al Grupo de Poetas “Nuevo Signo”. Miembro fundador del Premio Guatemalteco de Novela y de la Fundación Guatemalteca para las Letras.
Es autora de poesía: Barro Pleno, Otros Poemas, Nos habita el paraíso, Ultramar, Vuelo de piedra, puño y flor. Relatos breves: Astroloquía (en coautoría con Marcela Valdeavellano y Julia Abbott; ensayos y comentarios sobre temas de literatura, arte y feminismo. Su obra aparece en más de 30 antologías guatemaltecas y de otros países.
Uno de los poemas de Quiñónez.
Otra vez el amor (1)
Todo lo dulce y amargo
brotó de un solo instante:
tiempo espacio
sacrificados
al día que llegaba entre cenizas.
Visión, su luz, para vivir.
Cerrazón, su luz, para no saber vivir
sino atada a las manos
que escribieron la primera
y la última palabra.
Abarqué en la penumbra
todas las primaveras,
los soles,
los diminutos puntos de fuego
de todas las esquinas
y los puertos;
de todas las hogueras
que llamean
en la sombra que me cubre.
¡Todo el mar no bastó
para dejar sin huella
el breve trigo que dejó tu beso!