Las remesas en estos países marcarán un récord en 2024. Pese a tener uno de los crecimientos más bajos de los últimos años, un nuevo informe del BID prevé un crecimiento del 5 % respecto del 2023. De mantenerse la tendencia actual, recibirán USD 161 000M este año.
De acuerdo con el informe, la desaceleración estimada responde a la menor movilidad laboral registrada en 2023 y a un menor crecimiento del mercado laboral para personas migrantes.
A ello se suma, una mejora relativa en las economías de los países receptores de Centroamérica y México, lo que disminuye las necesidades de los beneficiarios.
México lidera
Este año México recibirá USD 65 000M, aunque su aumento interanual fue del 2.9 %, es el crecimiento más bajo de los últimos 10 años. Con todo, el ingreso —a nivel regional— es el más alto, por lo que se mantiene como principal receptor (40.5 %).
Las divisas que recibe provienen en un 96 % de EE. UU. y 1.8 % de Canadá, ya que la mayoría de sus migrantes radican en los dos vecinos del norte.
Centroamérica mantiene tendencia
En 2024, el istmo experimentó un crecimiento coherente (6.6 %) con su curso histórico. La cifra asciende a USD 45 700M. Nicaragua tiene el mayor porcentaje de recepción con 11.5 %; “los efectos de la crisis sociopolítica que viven impulsaron la migración de los nicaragüenses”, se explica en el escrito.
Guatemala ocupa el segundo puesto con 8.4 % y Costa Rica con 7. De forma agregada, para todos los centroamericanos el 73.5 % de las divisas que reciben provienen de EE. UU.
En la comparación regional, recibirá el 28,4 % de las remesas totales. Una participación similar a la del año anterior.
El Caribe crece poco
Hasta ahora los datos de 2024 de los países caribeños permiten prever que a fin de año su tasa de crecimiento será de un 2 % al recibir USD 18 000M. Haití (5.1 %) y Trinidad y Tobago (5) son los mayores receptores.
Por su parte, República Dominicana y Jamaica mostraron tasas bajas, debido a su estabilidad económica y crecimiento.
El ingreso de remesas representó el 11.6 % del total en ALC. Una participación similar a la de 2023. También, en su mayoría, proviene de EE. UU.
Sudamérica con mayor participación
Esta zona alcanzó tasas de crecimiento mayores a lo observado el año pasado. Con un 9.1 %, es decir, USD 31.7M. Colombia recibió la mayor cantidad; esto es producto de la migración durante 2022 y 2023.
A diferencia de las otras áreas, de forma agregada, menos de la mitad de las divisas provienen de EE. UU. (35.7 %). Europa es el origen del 36.2 % de las mismas, siendo España el principal país con 19.7 %. El resto son remesas intrarregionales (Argentina, Chile y Brasil).
En 2024, Sudamérica fue la receptora del 19.5 % que llegaron a la región.
El rol de las divisas
Entre los hombres, la mediana de remesas enviadas se mantiene estable durante los primeros 15 años. El porcentaje disminuye con el tiempo de permanencia, tanto porque los migrantes incrementan sus ingresos o los vínculos en sus países disminuyen. En las mujeres, el porcentaje destinado a divisas se mantiene estable en el tiempo; los montos enviados aumentan a lo largo de los años.
En resumen, su papel es asegurar el nivel de vida de las familias en los países de origen. Un 80 % de migrantes indica que el dinero se destina a manutención, lo que incluye gastos cotidianos de comida, vivienda, transporte, entre otros.
Un segundo uso corresponde a gastos médicos. Otros conceptos abarcan educación, ahorros, negocios e inmuebles.
Con todo, las remesas mantuvieron su peso para las economías receptoras de estos flujos. De esta manera, la relación entre el PIB y los países receptores alcanzó un 2.3 %, ligeramente menor al del último año (2.5).
Las remesas en estos países marcarán un récord en 2024. Pese a tener uno de los crecimientos más bajos de los últimos años, un nuevo informe del BID prevé un crecimiento del 5 % respecto del 2023. De mantenerse la tendencia actual, recibirán USD 161 000M este año.
De acuerdo con el informe, la desaceleración estimada responde a la menor movilidad laboral registrada en 2023 y a un menor crecimiento del mercado laboral para personas migrantes.
A ello se suma, una mejora relativa en las economías de los países receptores de Centroamérica y México, lo que disminuye las necesidades de los beneficiarios.
México lidera
Este año México recibirá USD 65 000M, aunque su aumento interanual fue del 2.9 %, es el crecimiento más bajo de los últimos 10 años. Con todo, el ingreso —a nivel regional— es el más alto, por lo que se mantiene como principal receptor (40.5 %).
Las divisas que recibe provienen en un 96 % de EE. UU. y 1.8 % de Canadá, ya que la mayoría de sus migrantes radican en los dos vecinos del norte.
Centroamérica mantiene tendencia
En 2024, el istmo experimentó un crecimiento coherente (6.6 %) con su curso histórico. La cifra asciende a USD 45 700M. Nicaragua tiene el mayor porcentaje de recepción con 11.5 %; “los efectos de la crisis sociopolítica que viven impulsaron la migración de los nicaragüenses”, se explica en el escrito.
Guatemala ocupa el segundo puesto con 8.4 % y Costa Rica con 7. De forma agregada, para todos los centroamericanos el 73.5 % de las divisas que reciben provienen de EE. UU.
En la comparación regional, recibirá el 28,4 % de las remesas totales. Una participación similar a la del año anterior.
El Caribe crece poco
Hasta ahora los datos de 2024 de los países caribeños permiten prever que a fin de año su tasa de crecimiento será de un 2 % al recibir USD 18 000M. Haití (5.1 %) y Trinidad y Tobago (5) son los mayores receptores.
Por su parte, República Dominicana y Jamaica mostraron tasas bajas, debido a su estabilidad económica y crecimiento.
El ingreso de remesas representó el 11.6 % del total en ALC. Una participación similar a la de 2023. También, en su mayoría, proviene de EE. UU.
Sudamérica con mayor participación
Esta zona alcanzó tasas de crecimiento mayores a lo observado el año pasado. Con un 9.1 %, es decir, USD 31.7M. Colombia recibió la mayor cantidad; esto es producto de la migración durante 2022 y 2023.
A diferencia de las otras áreas, de forma agregada, menos de la mitad de las divisas provienen de EE. UU. (35.7 %). Europa es el origen del 36.2 % de las mismas, siendo España el principal país con 19.7 %. El resto son remesas intrarregionales (Argentina, Chile y Brasil).
En 2024, Sudamérica fue la receptora del 19.5 % que llegaron a la región.
El rol de las divisas
Entre los hombres, la mediana de remesas enviadas se mantiene estable durante los primeros 15 años. El porcentaje disminuye con el tiempo de permanencia, tanto porque los migrantes incrementan sus ingresos o los vínculos en sus países disminuyen. En las mujeres, el porcentaje destinado a divisas se mantiene estable en el tiempo; los montos enviados aumentan a lo largo de los años.
En resumen, su papel es asegurar el nivel de vida de las familias en los países de origen. Un 80 % de migrantes indica que el dinero se destina a manutención, lo que incluye gastos cotidianos de comida, vivienda, transporte, entre otros.
Un segundo uso corresponde a gastos médicos. Otros conceptos abarcan educación, ahorros, negocios e inmuebles.
Con todo, las remesas mantuvieron su peso para las economías receptoras de estos flujos. De esta manera, la relación entre el PIB y los países receptores alcanzó un 2.3 %, ligeramente menor al del último año (2.5).