Política
Política
Empresa
Empresa
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial
Videos
Videos

Aranceles: golpe bajo al DR-CAFTA

Arte: 1000ton
María José Aresti y Miguel Rodríguez
08 de abril, 2025

El reciente cambio en la política arancelaria de EE. UU. ha sacudido Centroamérica. La medida, amparada en argumentos de seguridad nacional, revive viejos temores sobre estabilidad de relaciones comerciales y certidumbre jurídica que el acuerdo otorgaba a la región.

Por qué importa. La imposición de nuevos gravámenes coincide con el periodo en que se anticipaba una posible renegociación del DR-CAFTA.

  • La inclusión de la región en la lista de países afectados —con una tasa del 10 %— resulta inesperada dado el superávit comercial estadounidense.

    SUSCRÍBASE A NUESTRO NEWSLETTER DE EMPRESA
  • A su vez, erosiona la ventaja competitiva que se otorgaba a los países firmantes. “Esa certeza que teníamos se perdió”, asegura Paul Boteo, director de Fundación Libertad y Desarrollo.

  • Si bien una renegociación es factible, el panorama se presenta complejo. El acuerdo necesitaría ajustes para adaptarse a las nuevas realidades comerciales.

 

Visto y no visto. Detrás del argumento del déficit comercial, las tarifas operan como un mecanismo de presión para forzar la relocalización industrial y sancionar la ineficiencia estructural en países socios. 

  • Una apuesta realista pasa por mejorar las aduanas, simplificar procesos logísticos y aprovechar las ventajas existentes para obtener buena voluntad diplomática.

  • La diversificación de mercados y cooperación con Europa son esenciales para mitigar el impacto. Es una vía de escape a largo plazo.

  • Sin embargo, mantener el DR-CAFTA es crucial. Boteo asegura que no podemos permitirnos abandonar el tratado.

 

Sí, pero. Algunos ven la medida como una amenaza, otros la interpretan como oportunidad. Según Christopher Mejía, ex analista de Mercados Financieros Internacionales del Departamento del Tesoro, la clave está en la rapidez con que los gobiernos actúen.

  • Las empresas que antes optaban por manufacturar en Asia, podrían reconsiderar sus opciones. “Centroamérica está bien posicionada para aprovechar esta tendencia”, asegura Mejía.

  • Será fundamental el trabajo con el sector privado para atraer compañías globales. Un cambio que implicaría manufactura de bajo costo y productos de mayor valor agregado.

  • A largo plazo, crear un entorno de colaboración entre empresas y gobiernos posicionaría a la región como un actor clave en el comercio post-aranceles.

 

El otro lado. De acuerdo con allegados a la administración, las nuevas tarifas no son simples medidas proteccionistas: responden a un diseño mayor. Funcionan como palanca inicial y presión negociadora para forzar una reconfiguración del sistema económico global en favor de EE. UU.

  • El objetivo final sería un acuerdo multilateral —un posible “Mar-a-Lago” moment a lo Bretton Woods— donde otras potencias acepten revalorizar sus monedas frente al dólar. Esto permitiría recuperar competitividad industrial estadounidense sin devaluar su divisa.

  • Según Stephen Miran, principal asesor económico de Trump, los aranceles generan ingresos, disciplinan a socios comerciales y refuerzan el dólar.

  • El centro de gravedad sigue siendo estratégico: restaurar la autonomía manufacturera como pilar de poder económico y militar.

 

En conclusión. La consecuencia inmediata es la incertidumbre que suscita para el comercio e inversión, al romperse la confianza que ofrecía el tratado. Con todo, se debe seguir negociando el DR-CAFTA para preservar sus beneficios cuando los vientos en Washington cambien.

SUSCRÍBASE A NUESTRO NEWSLETTER DE EMPRESA

Aranceles: golpe bajo al DR-CAFTA

Arte: 1000ton
María José Aresti y Miguel Rodríguez
08 de abril, 2025

El reciente cambio en la política arancelaria de EE. UU. ha sacudido Centroamérica. La medida, amparada en argumentos de seguridad nacional, revive viejos temores sobre estabilidad de relaciones comerciales y certidumbre jurídica que el acuerdo otorgaba a la región.

Por qué importa. La imposición de nuevos gravámenes coincide con el periodo en que se anticipaba una posible renegociación del DR-CAFTA.

  • La inclusión de la región en la lista de países afectados —con una tasa del 10 %— resulta inesperada dado el superávit comercial estadounidense.

    SUSCRÍBASE A NUESTRO NEWSLETTER DE EMPRESA
  • A su vez, erosiona la ventaja competitiva que se otorgaba a los países firmantes. “Esa certeza que teníamos se perdió”, asegura Paul Boteo, director de Fundación Libertad y Desarrollo.

  • Si bien una renegociación es factible, el panorama se presenta complejo. El acuerdo necesitaría ajustes para adaptarse a las nuevas realidades comerciales.

 

Visto y no visto. Detrás del argumento del déficit comercial, las tarifas operan como un mecanismo de presión para forzar la relocalización industrial y sancionar la ineficiencia estructural en países socios. 

  • Una apuesta realista pasa por mejorar las aduanas, simplificar procesos logísticos y aprovechar las ventajas existentes para obtener buena voluntad diplomática.

  • La diversificación de mercados y cooperación con Europa son esenciales para mitigar el impacto. Es una vía de escape a largo plazo.

  • Sin embargo, mantener el DR-CAFTA es crucial. Boteo asegura que no podemos permitirnos abandonar el tratado.

 

Sí, pero. Algunos ven la medida como una amenaza, otros la interpretan como oportunidad. Según Christopher Mejía, ex analista de Mercados Financieros Internacionales del Departamento del Tesoro, la clave está en la rapidez con que los gobiernos actúen.

  • Las empresas que antes optaban por manufacturar en Asia, podrían reconsiderar sus opciones. “Centroamérica está bien posicionada para aprovechar esta tendencia”, asegura Mejía.

  • Será fundamental el trabajo con el sector privado para atraer compañías globales. Un cambio que implicaría manufactura de bajo costo y productos de mayor valor agregado.

  • A largo plazo, crear un entorno de colaboración entre empresas y gobiernos posicionaría a la región como un actor clave en el comercio post-aranceles.

 

El otro lado. De acuerdo con allegados a la administración, las nuevas tarifas no son simples medidas proteccionistas: responden a un diseño mayor. Funcionan como palanca inicial y presión negociadora para forzar una reconfiguración del sistema económico global en favor de EE. UU.

  • El objetivo final sería un acuerdo multilateral —un posible “Mar-a-Lago” moment a lo Bretton Woods— donde otras potencias acepten revalorizar sus monedas frente al dólar. Esto permitiría recuperar competitividad industrial estadounidense sin devaluar su divisa.

  • Según Stephen Miran, principal asesor económico de Trump, los aranceles generan ingresos, disciplinan a socios comerciales y refuerzan el dólar.

  • El centro de gravedad sigue siendo estratégico: restaurar la autonomía manufacturera como pilar de poder económico y militar.

 

En conclusión. La consecuencia inmediata es la incertidumbre que suscita para el comercio e inversión, al romperse la confianza que ofrecía el tratado. Con todo, se debe seguir negociando el DR-CAFTA para preservar sus beneficios cuando los vientos en Washington cambien.

¿Quiere recibir notificaciones de alertas?