Se realizó el primer acercamiento con las comunas que estarán involucradas en el Plan de Alianza para la Prosperidad con el propósito de informar y abrir un diálogo que resuelva dudas acerca de las acciones que se implementarán dentro de esta estrategia.
“El objetivo principal del Plan es mejorar las condiciones de vida de nuestros compatriotas, creando más y mejores oportunidades económicas. Así pues, de esta manera, esperamos lograr que disminuyan los deseos de nuestros habitantes de ir a buscar un mejor nivel de vida lejos de sus familias en otros países”, explicó Acisclo Valladares Urruela, Comisionado Presidencial para la Competitividad e Inversión.
Este objetivo se logrará por medio de cuatro ejes: dinamizar el sector productivo para crear oportunidades económicas, desarrollar oportunidades para el capital humano, mejorar la seguridad ciudadana y el acceso a la justicia y fortalecer las instituciones para aumentar la confianza en la población.
Este Plan contará con apoyo del Gobierno de Estados Unidos, que en diciembre del año pasado aprobó US$750 millones en su estrategia de relacionamiento con Centroamérica.
“Actualmente nos encontramos realizando un cronograma de visitas a los alcaldes de los municipios priorizados para continuar la comunicación y empezar a formular proyectos para el desarrollo económico de cada territorio”, añadió el Comisionado.
Los proyectos prioritarios para 2016 estarán enfocados en medianas y pequeñas empresas, cobertura en educación, agricultura familiar, seguridad comunitaria, transparencia y apoyo a migrantes retornados.
Cabe resaltar que a partir de junio de 2014, el Programa Nacional de Competitividad coordina los esfuerzos público y privado de Guatemala, canalizando los insumos obtenidos por la sociedad civil a nivel local y trasladando hacia el diálogo regional la información recabada en las distintas reuniones internas realizadas. Estos aportes, que cada país recopila a lo interno, logran consolidar la visión regional de la aplicación del Plan de Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte, que incluye a Guatemala, El Salvador y Honduras, el cual espera generar 600 mil nuevos empleos, alrededor de 200 mil para Guatemala.
Se realizó el primer acercamiento con las comunas que estarán involucradas en el Plan de Alianza para la Prosperidad con el propósito de informar y abrir un diálogo que resuelva dudas acerca de las acciones que se implementarán dentro de esta estrategia.
“El objetivo principal del Plan es mejorar las condiciones de vida de nuestros compatriotas, creando más y mejores oportunidades económicas. Así pues, de esta manera, esperamos lograr que disminuyan los deseos de nuestros habitantes de ir a buscar un mejor nivel de vida lejos de sus familias en otros países”, explicó Acisclo Valladares Urruela, Comisionado Presidencial para la Competitividad e Inversión.
Este objetivo se logrará por medio de cuatro ejes: dinamizar el sector productivo para crear oportunidades económicas, desarrollar oportunidades para el capital humano, mejorar la seguridad ciudadana y el acceso a la justicia y fortalecer las instituciones para aumentar la confianza en la población.
Este Plan contará con apoyo del Gobierno de Estados Unidos, que en diciembre del año pasado aprobó US$750 millones en su estrategia de relacionamiento con Centroamérica.
“Actualmente nos encontramos realizando un cronograma de visitas a los alcaldes de los municipios priorizados para continuar la comunicación y empezar a formular proyectos para el desarrollo económico de cada territorio”, añadió el Comisionado.
Los proyectos prioritarios para 2016 estarán enfocados en medianas y pequeñas empresas, cobertura en educación, agricultura familiar, seguridad comunitaria, transparencia y apoyo a migrantes retornados.
Cabe resaltar que a partir de junio de 2014, el Programa Nacional de Competitividad coordina los esfuerzos público y privado de Guatemala, canalizando los insumos obtenidos por la sociedad civil a nivel local y trasladando hacia el diálogo regional la información recabada en las distintas reuniones internas realizadas. Estos aportes, que cada país recopila a lo interno, logran consolidar la visión regional de la aplicación del Plan de Alianza para la Prosperidad del Triángulo Norte, que incluye a Guatemala, El Salvador y Honduras, el cual espera generar 600 mil nuevos empleos, alrededor de 200 mil para Guatemala.