Para el candidato Roberto González, de la coalición de los partidos Compromiso, Renovación y Orden (Creo) y Unionista, el tema económico le es bastante cómodo. Estudió Economía en la Universidad Francisco Marroquín (UFM) y luego obtuvo un postgrado de especialización en Evaluación de Proyectos en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Actualmente es Administrador de Proyectos Profesional certificado por la Universidad de Stanford.
Por otro lado, ha sido catedrático en varias universidades desde hace 15 años. Actualmente dicta la cátedra de Evaluación de Proyectos a los alumnos de último año de las carreras de Economía, Administración y Auditoria en la UFM.
En su equipo de trabajo en el tema económico dice que tiene a gente valiosa como Carolina Roca y Víctor Moscoso. Su rol es de coordinación pero también discute con ellos conceptos ideológicos. “He analizado punto por punto ese plan que vamos a difundir en estos días, lo he revisado varias veces. Soy muy poco dado a esos términos que a veces usamos de manera discrecional y que no dicen nada. Nada de adjetivos van en nuestra agenda, porque si no se vuelve retórica”, dice.
El Estado debe facilitar el clima de negocios
En cuanto a competitividad y desarrollo, González visualiza el rol de Gobierno como un facilitador de las condiciones necesarias para la actividad económica. “Fundamental en ese actuar es el respeto absoluto a la propiedad, libertad y lo más importante: certeza jurídica. También se deben mejorar los procesos de trámites de licencias y otros”, detalla.
Opina que el libertario se queda allí, pero ellos van más allá. “Se han encontrado maneras civilizadas de bajar costos. Por ejemplo es anti económico que cada quién tenga su pozo de agua ó que se abastezcan de energía ellos mismos, porque si se hace una sola instalación para todos saldría más barato”, afirma.
Allí es donde entra, según explica, la economía social de mercado en la que se basa su plan de gobierno. “Nos centramos tanto en el capital físico como en el humano, así como en el tiempo como recurso”, explica.
En cuanto al capital físico, es necesario fortalecer la infraestructura vial, puertos y aeropuertos, entre otros. “Las empresas que internalizan esos costos pierden competitividad. Algo fundamental es la energía por lo que debe seguirse ampliando la matriz energética que va cambiando poco a poco. Igual los sistemas de saneamiento de agua y drenaje”, considera.
Empleos por medio de la construcción
En cuanto al capital humano, se necesita que la gente productiva esté capacitada, educada y sana, comentó el candidato, quien considera que eso en nuestro país no se cumple. “Guatemala tiene un alto ausentismo laboral por enfermedades. Allí estamos hablando del paradigma del desarrollo porque la persona es un fin en sí mismo, tiene primacía, no es un medio para obtener algo”, aclaró.
A la Ley de inversión y empleo que se ha tratado de impulsar le ve cosas positivas porque “artificialmente” hay que incentivar al inversionista, pero señala que esos incentivos no deben ser permanentes.
Para generar oportunidades a las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) señala que impulsarían el tema de la vivienda, que también está pendiente y hay que resolver. “Se implementaría el subsidio a la vivienda, nosotros lo vamos a orientar al subsidio de la tasa de interés. No es corrupto porque es más simple”, dice.
Con esto esperan generar empleo en todas las industrias relacionadas, incluso más de lo que ofrece la mencionada Ley de Inversión y Empleo.
Mejorar la moral tributaria de todos
González dice que con la Reforma Fiscal impulsada por el actual gobierno el que más sufrió fue el guatemalteco promedio, de clase media, porque cargó con la recaudación en este período. “Mucha gente se pasó al mercado informal por eso. No solo le subieron los costos sino que pagar impuestos es engorroso y complicado y no se puede competir con la economía informa ni con la piratería y contrabando”, expone.
“Al retomar el control en la Superintendencia de Administración Tributaria (Sat) y tener una flexibilidad en la forma de pagar impuestos se podría combatir la informalidad”, sostiene. Para mejorar la transparencia, según González la Sat ya tiene los vehículos tecnológicos pero debe usarlos adecuadamente. “Debe llevarse profesionales capaces que quieran hacer su trabajo bien. No hay necesidad de traer a otra empresa que le dé asesoría, la Sat tiene cómo salir a delante”, afirma.
Por otro lado, dice que hay que revertir la politización que tuvo la Sat en los últimos años. “Gente que ya tenía muchos años trabajando allí, gente con especialidades, fueron sacados por razones políticas. Por eso uno de las prioridades es rescatar la Sat dentro de los primeros 90 días de administración”, concluye.
Para el candidato Roberto González, de la coalición de los partidos Compromiso, Renovación y Orden (Creo) y Unionista, el tema económico le es bastante cómodo. Estudió Economía en la Universidad Francisco Marroquín (UFM) y luego obtuvo un postgrado de especialización en Evaluación de Proyectos en la Pontificia Universidad Católica de Chile. Actualmente es Administrador de Proyectos Profesional certificado por la Universidad de Stanford.
Por otro lado, ha sido catedrático en varias universidades desde hace 15 años. Actualmente dicta la cátedra de Evaluación de Proyectos a los alumnos de último año de las carreras de Economía, Administración y Auditoria en la UFM.
En su equipo de trabajo en el tema económico dice que tiene a gente valiosa como Carolina Roca y Víctor Moscoso. Su rol es de coordinación pero también discute con ellos conceptos ideológicos. “He analizado punto por punto ese plan que vamos a difundir en estos días, lo he revisado varias veces. Soy muy poco dado a esos términos que a veces usamos de manera discrecional y que no dicen nada. Nada de adjetivos van en nuestra agenda, porque si no se vuelve retórica”, dice.
El Estado debe facilitar el clima de negocios
En cuanto a competitividad y desarrollo, González visualiza el rol de Gobierno como un facilitador de las condiciones necesarias para la actividad económica. “Fundamental en ese actuar es el respeto absoluto a la propiedad, libertad y lo más importante: certeza jurídica. También se deben mejorar los procesos de trámites de licencias y otros”, detalla.
Opina que el libertario se queda allí, pero ellos van más allá. “Se han encontrado maneras civilizadas de bajar costos. Por ejemplo es anti económico que cada quién tenga su pozo de agua ó que se abastezcan de energía ellos mismos, porque si se hace una sola instalación para todos saldría más barato”, afirma.
Allí es donde entra, según explica, la economía social de mercado en la que se basa su plan de gobierno. “Nos centramos tanto en el capital físico como en el humano, así como en el tiempo como recurso”, explica.
En cuanto al capital físico, es necesario fortalecer la infraestructura vial, puertos y aeropuertos, entre otros. “Las empresas que internalizan esos costos pierden competitividad. Algo fundamental es la energía por lo que debe seguirse ampliando la matriz energética que va cambiando poco a poco. Igual los sistemas de saneamiento de agua y drenaje”, considera.
Empleos por medio de la construcción
En cuanto al capital humano, se necesita que la gente productiva esté capacitada, educada y sana, comentó el candidato, quien considera que eso en nuestro país no se cumple. “Guatemala tiene un alto ausentismo laboral por enfermedades. Allí estamos hablando del paradigma del desarrollo porque la persona es un fin en sí mismo, tiene primacía, no es un medio para obtener algo”, aclaró.
A la Ley de inversión y empleo que se ha tratado de impulsar le ve cosas positivas porque “artificialmente” hay que incentivar al inversionista, pero señala que esos incentivos no deben ser permanentes.
Para generar oportunidades a las micro, pequeñas y medianas empresas (Mipymes) señala que impulsarían el tema de la vivienda, que también está pendiente y hay que resolver. “Se implementaría el subsidio a la vivienda, nosotros lo vamos a orientar al subsidio de la tasa de interés. No es corrupto porque es más simple”, dice.
Con esto esperan generar empleo en todas las industrias relacionadas, incluso más de lo que ofrece la mencionada Ley de Inversión y Empleo.
Mejorar la moral tributaria de todos
González dice que con la Reforma Fiscal impulsada por el actual gobierno el que más sufrió fue el guatemalteco promedio, de clase media, porque cargó con la recaudación en este período. “Mucha gente se pasó al mercado informal por eso. No solo le subieron los costos sino que pagar impuestos es engorroso y complicado y no se puede competir con la economía informa ni con la piratería y contrabando”, expone.
“Al retomar el control en la Superintendencia de Administración Tributaria (Sat) y tener una flexibilidad en la forma de pagar impuestos se podría combatir la informalidad”, sostiene. Para mejorar la transparencia, según González la Sat ya tiene los vehículos tecnológicos pero debe usarlos adecuadamente. “Debe llevarse profesionales capaces que quieran hacer su trabajo bien. No hay necesidad de traer a otra empresa que le dé asesoría, la Sat tiene cómo salir a delante”, afirma.
Por otro lado, dice que hay que revertir la politización que tuvo la Sat en los últimos años. “Gente que ya tenía muchos años trabajando allí, gente con especialidades, fueron sacados por razones políticas. Por eso uno de las prioridades es rescatar la Sat dentro de los primeros 90 días de administración”, concluye.