La confianza de los empresarios alemanes sorprendió con una caída en el mes de octubre después de cinco meses al alza, según un indicador muy seguido publicado este viernes.
El índice Ifo cayó de 107,7 puntos en septiembre a 107,4 en octubre. Los analistas consultados por Dow Jones Newswires esperaban que subiera a 108 puntos.
‘Las compañías han evaluado sus perspectivas con algo menos de optimismo que el mes pasado’, comentó Kai Carstensen, economista del instituto Ifo, que elabora el índice. ‘Las valoraciones de la situación empresarial actual fueron algo menos positivas, pero se mantienen por encima de la media. La economía alemana aún no está funcionando a toda máquina’, añadió.
El índice de la confianza de los empresarios de cara a los seis meses próximos retrocedió también, a 103,6 puntos, frente a los 104,2 de septiembre.
A pesar de estos datos, ‘la economía alemana sigue yendo bien’, gracias a un mercado laboral sólido y una recuperación de la actividad industrial, afirmó Carsten Brzeski, economista en el banco ING.
El experto consideró no obstante que el retroceso de los indicadores ‘nos recuerda que la invulnerabilidad alemana podría no durar siempre’. ‘El entorno exterior da lugar a una cierta prudencia’, advirtió Brzeski.
El experto explicó que la crisis de la deuda norteamericana y sus posibles consecuencias en la actividad económica, y la fortaleza del euro respecto al dólar ‘no son elementos favorables para el sector exportador alemán’.
La confianza de los empresarios alemanes sorprendió con una caída en el mes de octubre después de cinco meses al alza, según un indicador muy seguido publicado este viernes.
El índice Ifo cayó de 107,7 puntos en septiembre a 107,4 en octubre. Los analistas consultados por Dow Jones Newswires esperaban que subiera a 108 puntos.
‘Las compañías han evaluado sus perspectivas con algo menos de optimismo que el mes pasado’, comentó Kai Carstensen, economista del instituto Ifo, que elabora el índice. ‘Las valoraciones de la situación empresarial actual fueron algo menos positivas, pero se mantienen por encima de la media. La economía alemana aún no está funcionando a toda máquina’, añadió.
El índice de la confianza de los empresarios de cara a los seis meses próximos retrocedió también, a 103,6 puntos, frente a los 104,2 de septiembre.
A pesar de estos datos, ‘la economía alemana sigue yendo bien’, gracias a un mercado laboral sólido y una recuperación de la actividad industrial, afirmó Carsten Brzeski, economista en el banco ING.
El experto consideró no obstante que el retroceso de los indicadores ‘nos recuerda que la invulnerabilidad alemana podría no durar siempre’. ‘El entorno exterior da lugar a una cierta prudencia’, advirtió Brzeski.
El experto explicó que la crisis de la deuda norteamericana y sus posibles consecuencias en la actividad económica, y la fortaleza del euro respecto al dólar ‘no son elementos favorables para el sector exportador alemán’.