Política
Política
Empresa
Empresa
Opinión
Opinión
Inmobiliaria
Inmobiliaria
Agenda Empresarial
Agenda Empresarial
Videos
Videos

INVOLUCIÓN HUMANA 2a Parte

La ideología ‘woke’ pretende llevarnos de regreso en una involución hacia la bestia irracional. Para los “progres” las palabras ya no etiquetan conceptos. Los conceptos ya no tienen definiciones ni referentes en la realidad.

.
Warren Orbaugh |
01 de julio, 2024

En mi entrega anterior declaré que la palabra es importante para crear conocimiento. Escribí que el hombre por medio de su entendimiento piensa sobre lo percibido y empieza a diferenciar y clasificar entes observados según un atributo por él elegido como esencial; y forma así conceptos que hacen la función de una unidad mental, que es una ‘unidad sintética’ donde ha sintetizado o integrado los atributos esenciales de los entes subsumidos en el mismo; atributos de todos los entes que han existido, existen y existirán, omitiendo las diferencias, que sabe existen, pero que no son esenciales, y para poder acceder a esa información archivada le pone una etiqueta, una palabra con que registrarla para encontrarla de nuevo.  

Los conceptos se identifican definiéndolos al señalar a que grupo pertenecen y en que se diferencian de los otros singulares o entes subsumidos bajo el grupo. Por ejemplo, cuando digo: «El hombre es un animal racional», animal es el grupo al que pertenecen todos los singulares señalados como hombres y su diferencia de todo otro animal es que son capaces de razonar.

Concluí entonces que la importancia de la palabra que nombra y denota un concepto es que es una unidad mental que le permite al hombre referirse a una cantidad ilimitada de singulares, traspasando los límites de su enfoque simultáneo propio del conocimiento perceptual.

SUSCRÍBASE A NUESTRO NEWSLETTER

LA UNIDAD MENTAL

La palabra, por ejemplo, ‘mujer’, es un símbolo que denota un concepto, o sea que representa un número ilimitado de concretos similares de cierto tipo. Esta nueva entidad mental, que se usa después como una única unidad de pensamiento, le permite al hombre concebir, por ejemplo, distancias al usar una unidad de medida, como el metro, y así pasa de referirse a un lugar como “allá” a apuntar “a veinte kilómetros de aquí”. El pensar el espacio por medio de unidades de coordenadas cartesianas le permite identificar un punto exacto en la tierra. Y por medio de dos sistemas de unidades de coordenadas en movimiento le permite lanzar un cohete al espacio y que descienda en Marte. El uso de la palabra le permite el razonamiento discursivo; formar proposiciones que retraten objetivamente el estado de cosas en la realidad; crear y ordenar su conocimiento; la división del trabajo; el comercio y la sociedad libre; el reconocimiento de que el hombre es un fin en sí mismo; el respeto y tolerancia mutuos; el invento de tecnologías y máquinas; la producción de riqueza, y, lo más importante, convertirlo en humano, alejándolo de la bestia irracional.

La ideología ‘woke pretende llevarnos de regreso en una involución hacia la bestia irracional. Para los “progres” las palabras ya no etiquetan conceptos. Los conceptos ya no tienen definiciones ni referentes en la realidad. Ahora un varón pretende que se le reconozca como mujer porque dice auto percibirse como tal. No importa que su estructura natural sea la de varón.

LA INVOLUCIÓN

La ideología ‘woke’ pretende llevarnos de regreso en una involución hacia la bestia irracional. Para los “progres” las palabras ya no etiquetan conceptos. Los conceptos ya no tienen definiciones ni referentes en la realidad. Ahora un varón pretende que se le reconozca como mujer porque dice auto percibirse como tal. No importa que su estructura natural sea la de varón. Y si se le pide que defina ‘mujer’ para establecer que tipo de ente es con el que se identifica, no puede definirla. Para colmo, los “progres” de algunos países han logrado usar al Estado como arma para imponer su demencia al resto de la población, quienes tienen que fingir y falsear la realidad porque si no lo hacen van presos. Los “progres” han logrado que varones compitan contra mujeres en deportes femeninos, que usen los vestidores y baños de las féminas violando su intimidad.

LA IMPOSIBILIDAD DE RAZONAR

Al inventar “n” cantidad de géneros y de pronombres personales para tener un “lenguaje incluyente”, agraviado por el hecho de que se ofenden si alguien no adivina como quieren ser llamados, imposibilita totalmente razonar. “Todo hombre” ya no es un término universal, pues según estos incapaces en el arte de razonar bien, excluye a todo aquel que no nombra concretamente. El volver hacia el señalamiento de entes concretos en lugar de la abstracción en unidades sintéticas hace imposible el silogismo, el entimema, el polisilogismo, el epiquerema y el sorites. Y si no se puede razonar, tampoco se entienden los principios lógicos de no contradicción ni el del tercio excluso. Por eso no debe extrañar que estos animales “irracionales”, entre ellos varios homosexuales, defiendan al islam y a los terroristas de Hamás. No pueden entender la contradicción en la que caen.

INVOLUCIÓN HUMANA 2a Parte

La ideología ‘woke’ pretende llevarnos de regreso en una involución hacia la bestia irracional. Para los “progres” las palabras ya no etiquetan conceptos. Los conceptos ya no tienen definiciones ni referentes en la realidad.

Warren Orbaugh |
01 de julio, 2024
.

En mi entrega anterior declaré que la palabra es importante para crear conocimiento. Escribí que el hombre por medio de su entendimiento piensa sobre lo percibido y empieza a diferenciar y clasificar entes observados según un atributo por él elegido como esencial; y forma así conceptos que hacen la función de una unidad mental, que es una ‘unidad sintética’ donde ha sintetizado o integrado los atributos esenciales de los entes subsumidos en el mismo; atributos de todos los entes que han existido, existen y existirán, omitiendo las diferencias, que sabe existen, pero que no son esenciales, y para poder acceder a esa información archivada le pone una etiqueta, una palabra con que registrarla para encontrarla de nuevo.  

Los conceptos se identifican definiéndolos al señalar a que grupo pertenecen y en que se diferencian de los otros singulares o entes subsumidos bajo el grupo. Por ejemplo, cuando digo: «El hombre es un animal racional», animal es el grupo al que pertenecen todos los singulares señalados como hombres y su diferencia de todo otro animal es que son capaces de razonar.

Concluí entonces que la importancia de la palabra que nombra y denota un concepto es que es una unidad mental que le permite al hombre referirse a una cantidad ilimitada de singulares, traspasando los límites de su enfoque simultáneo propio del conocimiento perceptual.

SUSCRÍBASE A NUESTRO NEWSLETTER

LA UNIDAD MENTAL

La palabra, por ejemplo, ‘mujer’, es un símbolo que denota un concepto, o sea que representa un número ilimitado de concretos similares de cierto tipo. Esta nueva entidad mental, que se usa después como una única unidad de pensamiento, le permite al hombre concebir, por ejemplo, distancias al usar una unidad de medida, como el metro, y así pasa de referirse a un lugar como “allá” a apuntar “a veinte kilómetros de aquí”. El pensar el espacio por medio de unidades de coordenadas cartesianas le permite identificar un punto exacto en la tierra. Y por medio de dos sistemas de unidades de coordenadas en movimiento le permite lanzar un cohete al espacio y que descienda en Marte. El uso de la palabra le permite el razonamiento discursivo; formar proposiciones que retraten objetivamente el estado de cosas en la realidad; crear y ordenar su conocimiento; la división del trabajo; el comercio y la sociedad libre; el reconocimiento de que el hombre es un fin en sí mismo; el respeto y tolerancia mutuos; el invento de tecnologías y máquinas; la producción de riqueza, y, lo más importante, convertirlo en humano, alejándolo de la bestia irracional.

La ideología ‘woke pretende llevarnos de regreso en una involución hacia la bestia irracional. Para los “progres” las palabras ya no etiquetan conceptos. Los conceptos ya no tienen definiciones ni referentes en la realidad. Ahora un varón pretende que se le reconozca como mujer porque dice auto percibirse como tal. No importa que su estructura natural sea la de varón.

LA INVOLUCIÓN

La ideología ‘woke’ pretende llevarnos de regreso en una involución hacia la bestia irracional. Para los “progres” las palabras ya no etiquetan conceptos. Los conceptos ya no tienen definiciones ni referentes en la realidad. Ahora un varón pretende que se le reconozca como mujer porque dice auto percibirse como tal. No importa que su estructura natural sea la de varón. Y si se le pide que defina ‘mujer’ para establecer que tipo de ente es con el que se identifica, no puede definirla. Para colmo, los “progres” de algunos países han logrado usar al Estado como arma para imponer su demencia al resto de la población, quienes tienen que fingir y falsear la realidad porque si no lo hacen van presos. Los “progres” han logrado que varones compitan contra mujeres en deportes femeninos, que usen los vestidores y baños de las féminas violando su intimidad.

LA IMPOSIBILIDAD DE RAZONAR

Al inventar “n” cantidad de géneros y de pronombres personales para tener un “lenguaje incluyente”, agraviado por el hecho de que se ofenden si alguien no adivina como quieren ser llamados, imposibilita totalmente razonar. “Todo hombre” ya no es un término universal, pues según estos incapaces en el arte de razonar bien, excluye a todo aquel que no nombra concretamente. El volver hacia el señalamiento de entes concretos en lugar de la abstracción en unidades sintéticas hace imposible el silogismo, el entimema, el polisilogismo, el epiquerema y el sorites. Y si no se puede razonar, tampoco se entienden los principios lógicos de no contradicción ni el del tercio excluso. Por eso no debe extrañar que estos animales “irracionales”, entre ellos varios homosexuales, defiendan al islam y a los terroristas de Hamás. No pueden entender la contradicción en la que caen.

¿Quiere recibir notificaciones de alertas?