Vi por primera vez el intrigante efecto Lotus en un nenúfar en Laos durante un viaje por el sureste asiático. Los científicos se refieren al efecto Lotus como la propiedad de auto-limpiarse producto de ultra hidrofobia, donde las partículas de mugre son capturadas por góticas de agua debido a la arquitectura nanoscópica de las hojas de loto. No entiendo eso, pero el lector puede ver el fascinante efecto Lotus en breves videos en YouTube.
Días antes había visitado en Cambodia uno de los infamescampos de asesinatos de los fanáticos de la ideología comunista de Pol Pot queresultó en el genocidio de cerca del veinticinco porciento de la población enescasamente tres años. Emocionalmente, la serenidad del efecto Lotuscontrastaba con la previa sombría experiencia de los campos de muerte, y mepregunté por qué las atrocidades cometidas por los regímenes comunistassimplemente desaparecen en la mente de sus seguidores. Los colectivistasparecen haber desarrollado su propio efecto Lotus que auto purifica la asesinahistoria de su ideología. Nada se les pega.
El Libro Negro del Comunismo ofrece un estimado conservadorde cien millones de inocentes asesinados por los comunistas en el siglo 20. Aesto podemos añadir aproximadamenteveinte millones de víctimas de los nacionalsocialistas de Hitler. El paisajesiempre es el mismo, sea China bajo Mao, Corea de Kim Il-Sung, Vietnam con elTío Ho, Cuba bajo los Castro, Etiopía bajo Mengistu, Angola con Neto,Afganistán bajo Najibullah, y otros.
Pero las imágenes horripilantes de este paisaje deasesinatos colectivistas están dibujadas con pinceladas de justificación dondela culpa no reside en el colectivismo sino en sus oponentes. Nada se les pega. ¿Porqué no juzgamos al colectivismo por sus resultados? Del otro lado, elcapitalismo no tiene efecto Lotus y los colectivistas lo juzgan por susimperfecciones.
Cuando son confrontados con las catástrofes económicas ycriminal historia del colectivismo, los colectivistas astutamente silenciantales críticas. Considere las revelaciones del informe 2017 “Libertad depalabra bajo ataque” de The EconomistIntelligence Unit. El informe desarrolla un Índice de Libertad de losMedios para 167 países cubiertos por el Índice de Democracia de laorganización. El Índice de Libertad de los Medios mide en una escala de 0 a 10de la siguiente manera: 9-10, medios totalmente libres; 7-8 medios parcialmentelibres; 5-6, medios esencialmente no libres; 0-4, medios no libres.
De acuerdo a las calificaciones, solamente 30 de 167países cubiertos clasifican con medios totalmente libres (representando el 11%de la población mundial). En el otro extremo, 47 países son clasificados conmedios no libres (representando 35.9% de la población mundial). Los países conmayores calificaciones son todos democracias, mientras que con calificacionesde cero encontramos a China, Cuba, Corea del Norte y otros regímenesrepresivos.
La calidad de vida en cualquier país puede evaluarse, engran medida, por la capacidad de la ciudadanía de expresarse por sí misma.“Libertad de expresión es lo que nos permite ser individuos autónomos capacesde involucrarnos con ideas y decidir en cuáles creemos” (Índice Democracia2017).
Libertad de palabra, acceso a información y a medioslibres es lo necesario para un buen gobierno, no un quimérico auto purificadorefecto Lotus. Estas son libertades que facilitan a los ciudadanos cuestionar ycriticar sus gobiernos. Una sociedad fortalece sus valores sociales intercambiandoideas y argumentos. La libertad de expresión es nuestra libertad másimportante: sostiene todas las demás. Pero los colectivistas rechazan lalibertad de expresión para evitar ser juzgados por los terribles resultados deimplantar ideologías colectivistas.
En los campos de muerte de Cambodia yacen entre 2 y 3millones de víctimas: no solamente camboyanos, sino también etnias vietnamitas,tailandesas, chinas chams, cristianos ymonjes budistas, que fueron objetivos del Khmer Rojo por sus “estilos de vida ydelitos pre-revolucionarios”. Tales crímenes normalmente incluían tener algunaeducación o practicar alguna actividad de libre mercado.
Increíblemente, solamente un puñado de funcionarios delKhmer Rojo fueron juzgados por tales crímenes. Los colectivistas parecen sermaestros del efecto Lotus. Nada se les pega.
El ultimo libro del Dr. Azel es “Libertad para novatos”
Vi por primera vez el intrigante efecto Lotus en un nenúfar en Laos durante un viaje por el sureste asiático. Los científicos se refieren al efecto Lotus como la propiedad de auto-limpiarse producto de ultra hidrofobia, donde las partículas de mugre son capturadas por góticas de agua debido a la arquitectura nanoscópica de las hojas de loto. No entiendo eso, pero el lector puede ver el fascinante efecto Lotus en breves videos en YouTube.
Días antes había visitado en Cambodia uno de los infamescampos de asesinatos de los fanáticos de la ideología comunista de Pol Pot queresultó en el genocidio de cerca del veinticinco porciento de la población enescasamente tres años. Emocionalmente, la serenidad del efecto Lotuscontrastaba con la previa sombría experiencia de los campos de muerte, y mepregunté por qué las atrocidades cometidas por los regímenes comunistassimplemente desaparecen en la mente de sus seguidores. Los colectivistasparecen haber desarrollado su propio efecto Lotus que auto purifica la asesinahistoria de su ideología. Nada se les pega.
El Libro Negro del Comunismo ofrece un estimado conservadorde cien millones de inocentes asesinados por los comunistas en el siglo 20. Aesto podemos añadir aproximadamenteveinte millones de víctimas de los nacionalsocialistas de Hitler. El paisajesiempre es el mismo, sea China bajo Mao, Corea de Kim Il-Sung, Vietnam con elTío Ho, Cuba bajo los Castro, Etiopía bajo Mengistu, Angola con Neto,Afganistán bajo Najibullah, y otros.
Pero las imágenes horripilantes de este paisaje deasesinatos colectivistas están dibujadas con pinceladas de justificación dondela culpa no reside en el colectivismo sino en sus oponentes. Nada se les pega. ¿Porqué no juzgamos al colectivismo por sus resultados? Del otro lado, elcapitalismo no tiene efecto Lotus y los colectivistas lo juzgan por susimperfecciones.
Cuando son confrontados con las catástrofes económicas ycriminal historia del colectivismo, los colectivistas astutamente silenciantales críticas. Considere las revelaciones del informe 2017 “Libertad depalabra bajo ataque” de The EconomistIntelligence Unit. El informe desarrolla un Índice de Libertad de losMedios para 167 países cubiertos por el Índice de Democracia de laorganización. El Índice de Libertad de los Medios mide en una escala de 0 a 10de la siguiente manera: 9-10, medios totalmente libres; 7-8 medios parcialmentelibres; 5-6, medios esencialmente no libres; 0-4, medios no libres.
De acuerdo a las calificaciones, solamente 30 de 167países cubiertos clasifican con medios totalmente libres (representando el 11%de la población mundial). En el otro extremo, 47 países son clasificados conmedios no libres (representando 35.9% de la población mundial). Los países conmayores calificaciones son todos democracias, mientras que con calificacionesde cero encontramos a China, Cuba, Corea del Norte y otros regímenesrepresivos.
La calidad de vida en cualquier país puede evaluarse, engran medida, por la capacidad de la ciudadanía de expresarse por sí misma.“Libertad de expresión es lo que nos permite ser individuos autónomos capacesde involucrarnos con ideas y decidir en cuáles creemos” (Índice Democracia2017).
Libertad de palabra, acceso a información y a medioslibres es lo necesario para un buen gobierno, no un quimérico auto purificadorefecto Lotus. Estas son libertades que facilitan a los ciudadanos cuestionar ycriticar sus gobiernos. Una sociedad fortalece sus valores sociales intercambiandoideas y argumentos. La libertad de expresión es nuestra libertad másimportante: sostiene todas las demás. Pero los colectivistas rechazan lalibertad de expresión para evitar ser juzgados por los terribles resultados deimplantar ideologías colectivistas.
En los campos de muerte de Cambodia yacen entre 2 y 3millones de víctimas: no solamente camboyanos, sino también etnias vietnamitas,tailandesas, chinas chams, cristianos ymonjes budistas, que fueron objetivos del Khmer Rojo por sus “estilos de vida ydelitos pre-revolucionarios”. Tales crímenes normalmente incluían tener algunaeducación o practicar alguna actividad de libre mercado.
Increíblemente, solamente un puñado de funcionarios delKhmer Rojo fueron juzgados por tales crímenes. Los colectivistas parecen sermaestros del efecto Lotus. Nada se les pega.
El ultimo libro del Dr. Azel es “Libertad para novatos”