EL TIPO DE CAMBIO DE HOY ES DE: “Si hay una constante en mi trabajo periodístico esque he criticado a todos los que quieren acaparar poderes absolutos, sinimportar su ideología. Nuestras nacionesno necesitan hombres fuertes que polarizan a sus países”. Andrés Oppenheimer
Llevamos ya tres semanas de campaña política, que ha pasado casiinvisible por las nefastas disposiciones de la ley electoral y de partidospolíticos. Sin embargo, lo que sí hemosvisto es mucha más presencia de los candidatos a diferentes cargos de elecciónen entrevistas presenciales, otras transmitidas por radio, otras portelevisión. Algunas tienen más alcanceque otras, pero el poder escuchar directamente a los candidatos, es positivo.
Sin embargo, no debemos olvidar que el objetivo de todos es llegaral poder. Algunos con buenasintenciones, otros con muy malas y algunos otros, quien sabe. El poder es embriagante, especialmente paraaquellos que no tienen principios y valores morales “bien puestos”; sucumbirána “las mieles del poder” en un día o dos.
¿Cómo “catalogarlos” según este planteamiento? Difícil pues todosse venden como la mejor opción para “sacar al país” de esto o aquello. Investigarlosen redes sociales, internet y cualquier otra fuente, es importante. Sutrayectoria política o profesional nos debería dar una luz.
Hay una característica que identifica claramente a quienes quierenllegar al poder y no soltarlo. Son los socialistas, chairos, socialconfusos, mamertos, comunistas o como quieran llamarlos. Los de pensamiento de izquierda aman al podermás que a cualquier principio o valor moral que pudieron haber tenido algunavez. Sueñan con llegar al poder para“salvarnos a todos” de ese “capitalismo de oligarcas, corruptos y ladrones”.
Es fácil identificar a estos candidatos. Ofrecen que todos los servicios serán gratis,darán bolsas solidarias, pagarán a las madres de familia para que envíen a sushijos a la escuela, odian a los empresarios y los llaman corruptos, siendo los grandesunos oligarcas, convirtiendo a esta inocente palabra en un insultohorroroso.
Todos los izquierdosos que han llegado al poder se han convertidoen dictadores, sin excepción. Unos tardan más que otros, pero todos caen en esabajeza pues aman tanto al poder, que no lo quieren soltar. Desde la Rusia de Lenin hasta Nicolás Maduro,desde China hasta América Latina, no hay excepción. Muerte, hambre, miseria, desempleo, son laconstante, excepto para el dictador, quien vive disfrutando de las mieles delpoder, rodeado de serviles que se benefician de la migajas que les dan, siendoéstas mucho mayores de lo que tiene el ciudadano común.
Estos amantes del poder no dudan, ni por un segundo, en torcer laley a su conveniencia. La compra dejueces, sea con dinero, ofertas de un futuro mejor o cualquier otra cosa, es unade las estrategias más utilizadas. Corromper el sistema de justicia es la mejor forma de “asegurar” lavictoria.
Lo que olvidan es que los chapines no somos tontos. La gran mayoría de nosotros “ya no nostragamos el cuento”, no nos dejamos seducir por los cantos de sirena ni caemosen las garras de la mentira que sale del alma podrida de esos amantes delpoder.
“Si hay una constante en mi trabajo periodístico esque he criticado a todos los que quieren acaparar poderes absolutos, sinimportar su ideología. Nuestras nacionesno necesitan hombres fuertes que polarizan a sus países”. Andrés Oppenheimer
Llevamos ya tres semanas de campaña política, que ha pasado casiinvisible por las nefastas disposiciones de la ley electoral y de partidospolíticos. Sin embargo, lo que sí hemosvisto es mucha más presencia de los candidatos a diferentes cargos de elecciónen entrevistas presenciales, otras transmitidas por radio, otras portelevisión. Algunas tienen más alcanceque otras, pero el poder escuchar directamente a los candidatos, es positivo.
Sin embargo, no debemos olvidar que el objetivo de todos es llegaral poder. Algunos con buenasintenciones, otros con muy malas y algunos otros, quien sabe. El poder es embriagante, especialmente paraaquellos que no tienen principios y valores morales “bien puestos”; sucumbirána “las mieles del poder” en un día o dos.
¿Cómo “catalogarlos” según este planteamiento? Difícil pues todosse venden como la mejor opción para “sacar al país” de esto o aquello. Investigarlosen redes sociales, internet y cualquier otra fuente, es importante. Sutrayectoria política o profesional nos debería dar una luz.
Hay una característica que identifica claramente a quienes quierenllegar al poder y no soltarlo. Son los socialistas, chairos, socialconfusos, mamertos, comunistas o como quieran llamarlos. Los de pensamiento de izquierda aman al podermás que a cualquier principio o valor moral que pudieron haber tenido algunavez. Sueñan con llegar al poder para“salvarnos a todos” de ese “capitalismo de oligarcas, corruptos y ladrones”.
Es fácil identificar a estos candidatos. Ofrecen que todos los servicios serán gratis,darán bolsas solidarias, pagarán a las madres de familia para que envíen a sushijos a la escuela, odian a los empresarios y los llaman corruptos, siendo los grandesunos oligarcas, convirtiendo a esta inocente palabra en un insultohorroroso.
Todos los izquierdosos que han llegado al poder se han convertidoen dictadores, sin excepción. Unos tardan más que otros, pero todos caen en esabajeza pues aman tanto al poder, que no lo quieren soltar. Desde la Rusia de Lenin hasta Nicolás Maduro,desde China hasta América Latina, no hay excepción. Muerte, hambre, miseria, desempleo, son laconstante, excepto para el dictador, quien vive disfrutando de las mieles delpoder, rodeado de serviles que se benefician de la migajas que les dan, siendoéstas mucho mayores de lo que tiene el ciudadano común.
Estos amantes del poder no dudan, ni por un segundo, en torcer laley a su conveniencia. La compra dejueces, sea con dinero, ofertas de un futuro mejor o cualquier otra cosa, es unade las estrategias más utilizadas. Corromper el sistema de justicia es la mejor forma de “asegurar” lavictoria.
Lo que olvidan es que los chapines no somos tontos. La gran mayoría de nosotros “ya no nostragamos el cuento”, no nos dejamos seducir por los cantos de sirena ni caemosen las garras de la mentira que sale del alma podrida de esos amantes delpoder.
