EL TIPO DE CAMBIO DE HOY ES DE: Sí, anhelada por aquellos que son incapaces de aceptar que haypersonas más productivas, mejores en los negocios, tienen más oportunidades,son más inteligentes o, simplemente, ¡trabajan!
Promovida por quienes quieren convencer a una poblaciónnecesitada, pobre y con pocas oportunidades, la igualdad pareciera ser “justa”,pues la venden como quitarle a los ricos para dar a los pobres. La riqueza de unos es la causa de la pobrezade otros. Y así, fomentan el odio, la división y la lucha de clases.
El socialismo del siglo 21, o del pasado, o del futuro, siempreserá el mismo. Logrará la igualdad parala gran mayoría, pero en la pobreza.
Dice Dennis Prager (estadounidense, escritor y presentador deprogramas de entrevistas en la radio) que “el socialismo valora más la igualdadque la libertad”. Esto es más queevidente, pues quita libertades para ganar más poder y control sobre lapoblación. Los gobernantes empiezan por quitar la libertad de expresión. Esto limita grandemente las conversacionespor whatsapp, publicaciones en Facebook o twitter, al extremo de llegar aencarcelar a aquellos que se pronuncian en contra del gobierno y de susacciones.
Al querer que todos seamos iguales, quienes tienen el poderempezarán a quitarle a unos (a los que más tienen) para supuestamente darlo alos pobres. Sin embargo, la evidencia anivel mundial y a lo largo de los siglos, muestra que no reparte nada a nadie,simplemente se lo quedan todo. Las hijasdel fallecido Hugo Chávez son dos de las mujeres más millonarias del mundo.
El enfoque de estos socialistas, izquierdistas, comunistas,chairos, social-confusos, o como quieran llamarlos, es la igualdad deresultados. Todos tendremos lo mismo(nada o muy poco). El enfoque tiene que ser igualdad en las reglas. Esto implica que no haya privilegios paranadie, que todos tengamos las mismas oportunidades, los mismos derechos y, porsobre todo, que seamos iguales ante la ley.
Mason Cooley, (estadounidense, profesor emérito de la Universidadde Staten Island), dijo que “cuando la igualdad aumenta, también lo hace lacantidad de personas luchando por predominar”. Por supuesto que esto sucede pues, quien predomina de cualquier forma,podrá tener acceso a más cosas, como comida, para sobrevivir. Así que la igualdad supuestamente lograda porlos gobernantes, no tardará un solo día.
El proceso electoral está en sus fases iniciales. Las ofertas de campaña abundarán, no solopara convencer sino porque tendremos veintisiete o veintiocho candidatos a lapresidencia y vicepresidencia, además de las interminables planillas paradiputados y los candidatos a alcaldes de los 330 municipios, con sus concejosmunicipales.
Los candidatos de los partidos de izquierda se enfocarán en promoverla igualdad, pues es la única forma que creen tener para convencer a quienesviven en condiciones precarias. Nos tocaa quienes entendemos esto, llevar el mensaje a quienes no lo comprenden yanhelan una vida mejor.
Sí, anhelada por aquellos que son incapaces de aceptar que haypersonas más productivas, mejores en los negocios, tienen más oportunidades,son más inteligentes o, simplemente, ¡trabajan!
Promovida por quienes quieren convencer a una poblaciónnecesitada, pobre y con pocas oportunidades, la igualdad pareciera ser “justa”,pues la venden como quitarle a los ricos para dar a los pobres. La riqueza de unos es la causa de la pobrezade otros. Y así, fomentan el odio, la división y la lucha de clases.
El socialismo del siglo 21, o del pasado, o del futuro, siempreserá el mismo. Logrará la igualdad parala gran mayoría, pero en la pobreza.
Dice Dennis Prager (estadounidense, escritor y presentador deprogramas de entrevistas en la radio) que “el socialismo valora más la igualdadque la libertad”. Esto es más queevidente, pues quita libertades para ganar más poder y control sobre lapoblación. Los gobernantes empiezan por quitar la libertad de expresión. Esto limita grandemente las conversacionespor whatsapp, publicaciones en Facebook o twitter, al extremo de llegar aencarcelar a aquellos que se pronuncian en contra del gobierno y de susacciones.
Al querer que todos seamos iguales, quienes tienen el poderempezarán a quitarle a unos (a los que más tienen) para supuestamente darlo alos pobres. Sin embargo, la evidencia anivel mundial y a lo largo de los siglos, muestra que no reparte nada a nadie,simplemente se lo quedan todo. Las hijasdel fallecido Hugo Chávez son dos de las mujeres más millonarias del mundo.
El enfoque de estos socialistas, izquierdistas, comunistas,chairos, social-confusos, o como quieran llamarlos, es la igualdad deresultados. Todos tendremos lo mismo(nada o muy poco). El enfoque tiene que ser igualdad en las reglas. Esto implica que no haya privilegios paranadie, que todos tengamos las mismas oportunidades, los mismos derechos y, porsobre todo, que seamos iguales ante la ley.
Mason Cooley, (estadounidense, profesor emérito de la Universidadde Staten Island), dijo que “cuando la igualdad aumenta, también lo hace lacantidad de personas luchando por predominar”. Por supuesto que esto sucede pues, quien predomina de cualquier forma,podrá tener acceso a más cosas, como comida, para sobrevivir. Así que la igualdad supuestamente lograda porlos gobernantes, no tardará un solo día.
El proceso electoral está en sus fases iniciales. Las ofertas de campaña abundarán, no solopara convencer sino porque tendremos veintisiete o veintiocho candidatos a lapresidencia y vicepresidencia, además de las interminables planillas paradiputados y los candidatos a alcaldes de los 330 municipios, con sus concejosmunicipales.
Los candidatos de los partidos de izquierda se enfocarán en promoverla igualdad, pues es la única forma que creen tener para convencer a quienesviven en condiciones precarias. Nos tocaa quienes entendemos esto, llevar el mensaje a quienes no lo comprenden yanhelan una vida mejor.
