EL TIPO DE CAMBIO DE HOY ES DE: El debate en torno a la decisión del Presidente Alejandro Maldonado de que entre en vigencia el salario diferenciado en 4 (CUATRO) municipios es acertada. Específicamente nos referimos a Guastatoya (El Progreso), San Miguel Acasaguastlán (El Progreso), Estanzuela (Zacapa) y Masagua (Escuintla). El debate que se ha formado en contra de esto me parece miope, y sobre todo, que refleja nuevamente que la gente no lee y opina por opinar.
Este salario diferenciado es un salario mínimo y no máximo que incluye prestaciones laborales, seguro social, previsión social y cobertura familiar. Única y exclusivamente aplica a los 4 municipios mencionados, y solamente para la industria manufacturera ligera para exportación por lo que NO afectan los salarios de todos los otros rubros. Es importante subrayar que actualmente NO existe ni siquiera un solo empleo de esa industria en dichos municipios. El objetivo es generar 10,000 (DIEZ MIL) plazas de trabajo en esos municipios, que representaría aproximadamente Q300 millones en salarios por empleos directos, además de los beneficios a los sectores aledaños, indirectos, en comercio, transporte, alimentación, construcción, seguridad. Es decir, vendría a aceitar la maquinaria productiva de esos municipios.
La idea de esto es crear plazas de trabajo donde no existen, incentivar a que maquilas se trasladen allí en lugar de irse a Nicaragua, y que con ello, más familias logren llevar sustento a sus hogares. Es pues una oportunidad para miles de guatemaltecos de esas comunidades específicamente, que carecen de empleo formal o permanente, y por ende, de prestaciones y beneficios laborales. Siendo mínimo se complementará con incentivos de productividad que pueden incrementar los ingresos del trabajador significativamente. Hoy día, en la informalidad, no existe la posibilidad de suscitar un diálogo patrono-trabajador para discutir mejoras laborales, con esto se daría la oportunidad de que se logre.
Implica capacitación y por ende, valor agregado para estos trabajadores en el mercado laboral. O sea que no es una rebaja de salarios, no es una explotación del trabajador (repito que implica la obtención de prestaciones laborales y sociales que hoy día no tienen), y es combatir la pobreza que según el INE en dichos municipios es de Q700, es decir menor a los Q950 que es el promedio. Los salarios en cuestión sobrepasarían ese límite estando a más del doble de la línea de pobreza.
El decreto es legal y permitido bajo el Código de Trabajo. Sería el CUARTO salario diferenciado que existe en el país. Los otros tres son el agrícola, el no agrícola y el de maquila. El Presidente Alejandro Maldonado únicamente vino a responder el clamor de esas comunidades que necesitan desesperadamente que venga generado empleo la mayor brevedad posible. No es una propuesta del gobierno central, ni es una propuesta antojadiza. Ha sido discutida tripartitamente con las comunidades de esos municipios. Los municipios decidieron el nivel de salario conveniente y aceptable, éste fue trasladado a las autoridades competentes y por último a la Presidencia. O sea que no es una decisión de plumazo centralizada, ya que por primera vez se descentralizó la decisión y fueron escuchadas las comunidades. Es por consiguiente EL COLMO que la Procuraduría General de la Nación se haya pronunciado en contra de la generación de empleo formal en esas comunidades y me parece una enorme ironía que saquen a bailar hasta la Declaración Universal de Derechos Humanos, cuando precisamente lo que se busca es crear y desarrollar no anular y destruir.
La Corte de Constitucionalidad se pronunció en contra en el 2014 única y exclusivamente sobre el monto del salario. El mismo fue incrementado por la Presidencia a más del doble sobrepasando el mínimo de equivalencia a dos salarios mínimos asumiendo un ingreso generado por el padre y la madre. O sea que la oposición de la CC no tiene nada que ver con el espíritu de la medida en sí. Sólo en Costa Rica existen más del doble de salarios mínimos diferenciados, en ese que es el bastión de los amantes del populismo moderno. Si no hacemos esto, y no incentivamos la inversión extranjera que es una de las mejores fuentes de empleo, Guatemala quedará atrás en esta carrera contra nuestros vecinos del istmo, contra Vietnam y otros proveedores de mano de obra que a diferencia nuestra, hacen de todo y de más para atraer inversión.
Benjamin Franklin dijo que “el hambre espía en la casa de los pobres, pero si éstos son gente trabajadora, no se atreve a entrar”. Estas comunidades merecen la oportunidad de iniciar a construirse un futuro. La economía informal no es la respuesta, y es urgente por ende crear oportunidades de empleo que les permitan a esas familias necesitadas llevar el sustento a sus hogares, mejorar su autoestima, y salir adelante.
El debate en torno a la decisión del Presidente Alejandro Maldonado de que entre en vigencia el salario diferenciado en 4 (CUATRO) municipios es acertada. Específicamente nos referimos a Guastatoya (El Progreso), San Miguel Acasaguastlán (El Progreso), Estanzuela (Zacapa) y Masagua (Escuintla). El debate que se ha formado en contra de esto me parece miope, y sobre todo, que refleja nuevamente que la gente no lee y opina por opinar.
Este salario diferenciado es un salario mínimo y no máximo que incluye prestaciones laborales, seguro social, previsión social y cobertura familiar. Única y exclusivamente aplica a los 4 municipios mencionados, y solamente para la industria manufacturera ligera para exportación por lo que NO afectan los salarios de todos los otros rubros. Es importante subrayar que actualmente NO existe ni siquiera un solo empleo de esa industria en dichos municipios. El objetivo es generar 10,000 (DIEZ MIL) plazas de trabajo en esos municipios, que representaría aproximadamente Q300 millones en salarios por empleos directos, además de los beneficios a los sectores aledaños, indirectos, en comercio, transporte, alimentación, construcción, seguridad. Es decir, vendría a aceitar la maquinaria productiva de esos municipios.
La idea de esto es crear plazas de trabajo donde no existen, incentivar a que maquilas se trasladen allí en lugar de irse a Nicaragua, y que con ello, más familias logren llevar sustento a sus hogares. Es pues una oportunidad para miles de guatemaltecos de esas comunidades específicamente, que carecen de empleo formal o permanente, y por ende, de prestaciones y beneficios laborales. Siendo mínimo se complementará con incentivos de productividad que pueden incrementar los ingresos del trabajador significativamente. Hoy día, en la informalidad, no existe la posibilidad de suscitar un diálogo patrono-trabajador para discutir mejoras laborales, con esto se daría la oportunidad de que se logre.
Implica capacitación y por ende, valor agregado para estos trabajadores en el mercado laboral. O sea que no es una rebaja de salarios, no es una explotación del trabajador (repito que implica la obtención de prestaciones laborales y sociales que hoy día no tienen), y es combatir la pobreza que según el INE en dichos municipios es de Q700, es decir menor a los Q950 que es el promedio. Los salarios en cuestión sobrepasarían ese límite estando a más del doble de la línea de pobreza.
El decreto es legal y permitido bajo el Código de Trabajo. Sería el CUARTO salario diferenciado que existe en el país. Los otros tres son el agrícola, el no agrícola y el de maquila. El Presidente Alejandro Maldonado únicamente vino a responder el clamor de esas comunidades que necesitan desesperadamente que venga generado empleo la mayor brevedad posible. No es una propuesta del gobierno central, ni es una propuesta antojadiza. Ha sido discutida tripartitamente con las comunidades de esos municipios. Los municipios decidieron el nivel de salario conveniente y aceptable, éste fue trasladado a las autoridades competentes y por último a la Presidencia. O sea que no es una decisión de plumazo centralizada, ya que por primera vez se descentralizó la decisión y fueron escuchadas las comunidades. Es por consiguiente EL COLMO que la Procuraduría General de la Nación se haya pronunciado en contra de la generación de empleo formal en esas comunidades y me parece una enorme ironía que saquen a bailar hasta la Declaración Universal de Derechos Humanos, cuando precisamente lo que se busca es crear y desarrollar no anular y destruir.
La Corte de Constitucionalidad se pronunció en contra en el 2014 única y exclusivamente sobre el monto del salario. El mismo fue incrementado por la Presidencia a más del doble sobrepasando el mínimo de equivalencia a dos salarios mínimos asumiendo un ingreso generado por el padre y la madre. O sea que la oposición de la CC no tiene nada que ver con el espíritu de la medida en sí. Sólo en Costa Rica existen más del doble de salarios mínimos diferenciados, en ese que es el bastión de los amantes del populismo moderno. Si no hacemos esto, y no incentivamos la inversión extranjera que es una de las mejores fuentes de empleo, Guatemala quedará atrás en esta carrera contra nuestros vecinos del istmo, contra Vietnam y otros proveedores de mano de obra que a diferencia nuestra, hacen de todo y de más para atraer inversión.
Benjamin Franklin dijo que “el hambre espía en la casa de los pobres, pero si éstos son gente trabajadora, no se atreve a entrar”. Estas comunidades merecen la oportunidad de iniciar a construirse un futuro. La economía informal no es la respuesta, y es urgente por ende crear oportunidades de empleo que les permitan a esas familias necesitadas llevar el sustento a sus hogares, mejorar su autoestima, y salir adelante.
