En un entorno donde el cambio suele atribuirse a la presión estatal o social, líderes empresariales de distintos sectores demuestran que la verdadera transformación surge desde adentro. Durante el panel "Líderes que impulsan la transformación de la cultura empresarial", realizado en el marco del República Summit 2025: Libertad que transforma: mujer, empresa y familia, compartieron cómo la libertad, la familia y la responsabilidad individual pueden redefinir la cultura corporativa y fortalecer el bienestar colectivo sin recurrir a imposiciones externas.
Por qué importa. Las empresas no solo producen servicios; también moldean valores. Rodrigo Arenas, presidente editor de República, destacó que la innovación empresarial más genuina ocurre cuando surge de la autorregulación y no del mandato.
- Arenas cuestionó la idea de que las compañías solo cambian “a la fuerza”, subrayando que muchas ya promueven valores familiares sin intervención del Estado.
- El liderazgo empresarial, sostuvo, se fortalece cuando entiende que la prosperidad también depende de la calidad de las relaciones humanas dentro de la organización.
- Este enfoque refleja una visión liberal: empresas como agentes morales capaces de generar bienestar, no solo riqueza, a partir de la libertad responsable y el respeto a la dignidad de las personas.
En el radar. Herbert Hernández, director titular de Bantrab, expuso que en la institución, la equidad y la libertad de elección se traducen en resultados tangibles. Asegura que la inclusión no responde a una obligación legal, sino a una convicción institucional sobre el valor humano y la complementariedad entre hombres y mujeres.
- Bantrab cuenta con 2,478 mujeres, equivalentes al 48 % de su fuerza laboral, y 387 en cargos directivos, además de la primera vicepresidenta mujer en 60 años de historia. “No es por obligación, es por convicción”, subrayó Hernández.
- El liderazgo femenino ha fortalecido la cultura interna, aportando —según el directivo— “sentimiento, pasión y una forma distinta de ver las cosas” que complementa y enriquece las decisiones corporativas.
- Este modelo demuestra que cuando las empresas confían en la libertad y el mérito individual, logran una inclusión más auténtica que cualquier mandato o cuota impuesta.
Voces. Elizabeth Suárez, directora general de Corporación Acerera Centroamericana, compartió un testimonio que inspira y desafía estereotipos sobre liderazgo femenino en sectores tradicionalmente masculinos.
- Viuda a los 37 años y madre de cuatro, asumió el reto de rescatar una empresa en liquidación. “Me enamoré de la empresa”, contó, tras convencer a su padre de darle seis meses para reactivarla.
- Suárez promueve la corresponsabilidad y la igualdad de oportunidades desde la práctica: participa en CACIF Mujer, como en otros proyectos, para impulsar la empresarialidad femenina rural y urbana.
- Su historia refleja un principio liberal esencial: la libertad de emprender y crear es la base del progreso individual y social, más allá del género o la coyuntura.
En conclusión. La transformación empresarial no nace de la imposición, sino de la convicción. Cuando la libertad, la familia y el liderazgo humano guían las decisiones, las empresas no solo prosperan: también inspiran un cambio duradero en la sociedad.
En un entorno donde el cambio suele atribuirse a la presión estatal o social, líderes empresariales de distintos sectores demuestran que la verdadera transformación surge desde adentro. Durante el panel "Líderes que impulsan la transformación de la cultura empresarial", realizado en el marco del República Summit 2025: Libertad que transforma: mujer, empresa y familia, compartieron cómo la libertad, la familia y la responsabilidad individual pueden redefinir la cultura corporativa y fortalecer el bienestar colectivo sin recurrir a imposiciones externas.
Por qué importa. Las empresas no solo producen servicios; también moldean valores. Rodrigo Arenas, presidente editor de República, destacó que la innovación empresarial más genuina ocurre cuando surge de la autorregulación y no del mandato.
- Arenas cuestionó la idea de que las compañías solo cambian “a la fuerza”, subrayando que muchas ya promueven valores familiares sin intervención del Estado.
- El liderazgo empresarial, sostuvo, se fortalece cuando entiende que la prosperidad también depende de la calidad de las relaciones humanas dentro de la organización.
- Este enfoque refleja una visión liberal: empresas como agentes morales capaces de generar bienestar, no solo riqueza, a partir de la libertad responsable y el respeto a la dignidad de las personas.
En el radar. Herbert Hernández, director titular de Bantrab, expuso que en la institución, la equidad y la libertad de elección se traducen en resultados tangibles. Asegura que la inclusión no responde a una obligación legal, sino a una convicción institucional sobre el valor humano y la complementariedad entre hombres y mujeres.
- Bantrab cuenta con 2,478 mujeres, equivalentes al 48 % de su fuerza laboral, y 387 en cargos directivos, además de la primera vicepresidenta mujer en 60 años de historia. “No es por obligación, es por convicción”, subrayó Hernández.
- El liderazgo femenino ha fortalecido la cultura interna, aportando —según el directivo— “sentimiento, pasión y una forma distinta de ver las cosas” que complementa y enriquece las decisiones corporativas.
- Este modelo demuestra que cuando las empresas confían en la libertad y el mérito individual, logran una inclusión más auténtica que cualquier mandato o cuota impuesta.
Voces. Elizabeth Suárez, directora general de Corporación Acerera Centroamericana, compartió un testimonio que inspira y desafía estereotipos sobre liderazgo femenino en sectores tradicionalmente masculinos.
- Viuda a los 37 años y madre de cuatro, asumió el reto de rescatar una empresa en liquidación. “Me enamoré de la empresa”, contó, tras convencer a su padre de darle seis meses para reactivarla.
- Suárez promueve la corresponsabilidad y la igualdad de oportunidades desde la práctica: participa en CACIF Mujer, como en otros proyectos, para impulsar la empresarialidad femenina rural y urbana.
- Su historia refleja un principio liberal esencial: la libertad de emprender y crear es la base del progreso individual y social, más allá del género o la coyuntura.
En conclusión. La transformación empresarial no nace de la imposición, sino de la convicción. Cuando la libertad, la familia y el liderazgo humano guían las decisiones, las empresas no solo prosperan: también inspiran un cambio duradero en la sociedad.
EL TIPO DE CAMBIO DE HOY ES DE: