Seis días después del rescate de más de cien menores en Santa Rosa, las autoridades explicaron que han logrado instalar al grupo en el albergue Nuestras Raíces. Sin embargo, aseguraron que existen barreras que complican la atención.
- Elaboran un plan estratégico para atender al grupo para adaptarlo con la cultura, idioma y religión de la comunidad Lev Tahor.
En perspectiva. Marvin Rabanales, director de la Secretaría de Bienestar Social (SBS), informó que por el momento lograron estabilizar la situación en el albergue, luego de los inconvenientes del fin de semana, donde incluso fueron trasladados a un juzgado de Paz.
- Aseguró que poco a poco se han ido adaptando y que no ha sido fácil para ellos porque existen muchas barreras, entre ellas el idioma, la cultura y la religión.
- Además, indicó que los adolescentes son los que han tenido descompensaciones emocionales, porque consideran que están privados y que fueron aislados de su comunidad. “Todos reciben atención por el personal de la SBS”, agregó Rabanales.
- Reconoció que elaborar la estrategia de atención de los menores se demorará por lo complejo de la situación. Entre las mayores complicaciones ha sido la comunicación por el idioma y la alimentación, porque la dieta que llevan es diferente y rigurosa.
Qué sigue. Rabanales informó que en los próximos días el juzgado deberá realizar las audiencias para resolver la situación de los menores.
- “Las audiencias para conocer los casos pueden ser grupales o individuales, se desconoce. Un aspecto que se ha presentado es que los adultos, de la comunidad Lev Tahor, no han presentado las actas de nacimiento o registro de los menores”, aseveró.
- Presume que la mayoría de los niños son nacidos en Guatemala. “Hasta hoy no han registrado los documentos de nacimientos. Ellos argumentan que es porque en el pasado se les ha reprimido, pero las leyes guatemaltecas son claras”, agregó.
- Entre las acciones que son comunes en estos casos de menores están estudios socioeconómicos, psicológicos y estudios que manifiesten que los niños no han sido víctimas de violación de sus derechos.
Qué destacar. La SBS aseguró que son más de 200 personas las que se encuentran en el albergue ―niños, adolescentes y madres de bebés―. El lugar permanece con resguardo de la Policía Nacional Civil (PNC) por los incidentes del fin de semana,
- Familiares llegan a las instalaciones para entregar el alimento para qué entregar a los niños, porque la dieta es muy especial. “Muchos de los menores se resisten a recibir un vaso de agua; la alimentación es una barrera muy difícil”, indicó.
- Descarta que los operativos tengan relación con la religión. El conflicto inició con una denuncia de varios menores que se escaparon por maltrato, violación y agresión.
- Las declaraciones de Rabanales fueron en una entrevista en el programa A Primera Ahora, este jueves 26 de diciembre.
Seis días después del rescate de más de cien menores en Santa Rosa, las autoridades explicaron que han logrado instalar al grupo en el albergue Nuestras Raíces. Sin embargo, aseguraron que existen barreras que complican la atención.
- Elaboran un plan estratégico para atender al grupo para adaptarlo con la cultura, idioma y religión de la comunidad Lev Tahor.
En perspectiva. Marvin Rabanales, director de la Secretaría de Bienestar Social (SBS), informó que por el momento lograron estabilizar la situación en el albergue, luego de los inconvenientes del fin de semana, donde incluso fueron trasladados a un juzgado de Paz.
- Aseguró que poco a poco se han ido adaptando y que no ha sido fácil para ellos porque existen muchas barreras, entre ellas el idioma, la cultura y la religión.
- Además, indicó que los adolescentes son los que han tenido descompensaciones emocionales, porque consideran que están privados y que fueron aislados de su comunidad. “Todos reciben atención por el personal de la SBS”, agregó Rabanales.
- Reconoció que elaborar la estrategia de atención de los menores se demorará por lo complejo de la situación. Entre las mayores complicaciones ha sido la comunicación por el idioma y la alimentación, porque la dieta que llevan es diferente y rigurosa.
Qué sigue. Rabanales informó que en los próximos días el juzgado deberá realizar las audiencias para resolver la situación de los menores.
- “Las audiencias para conocer los casos pueden ser grupales o individuales, se desconoce. Un aspecto que se ha presentado es que los adultos, de la comunidad Lev Tahor, no han presentado las actas de nacimiento o registro de los menores”, aseveró.
- Presume que la mayoría de los niños son nacidos en Guatemala. “Hasta hoy no han registrado los documentos de nacimientos. Ellos argumentan que es porque en el pasado se les ha reprimido, pero las leyes guatemaltecas son claras”, agregó.
- Entre las acciones que son comunes en estos casos de menores están estudios socioeconómicos, psicológicos y estudios que manifiesten que los niños no han sido víctimas de violación de sus derechos.
Qué destacar. La SBS aseguró que son más de 200 personas las que se encuentran en el albergue ―niños, adolescentes y madres de bebés―. El lugar permanece con resguardo de la Policía Nacional Civil (PNC) por los incidentes del fin de semana,
- Familiares llegan a las instalaciones para entregar el alimento para qué entregar a los niños, porque la dieta es muy especial. “Muchos de los menores se resisten a recibir un vaso de agua; la alimentación es una barrera muy difícil”, indicó.
- Descarta que los operativos tengan relación con la religión. El conflicto inició con una denuncia de varios menores que se escaparon por maltrato, violación y agresión.
- Las declaraciones de Rabanales fueron en una entrevista en el programa A Primera Ahora, este jueves 26 de diciembre.